Al menos nueve de cada diez estudiantes en Corea del Sur terminan sus clases cerca de las 10 de la noche, de día acuden al colegio y por las tardes asisten a academias privadas, después de cumplir con sus asignaciones escolares apenas tienen 4 ó 5 horas para dormir.

Recientes informes señalan que son los estudiantes mejor preparados para el mundo, pero también los más estresados ante la presión de una sociedad cada vez más desarrollada y competitiva.

Un estudiante que se confesó agotado, dijo que tiene tanto miedo a la hora de recibir la calificaciones, que antes de ello "piensa en saltar por la ventana". El estrés se ha incrementado hasta en cinco veces en los últimos 20 años el número de suicidios entre los adolescentes.

Los suicidios se multiplican en las épocas de exámenes. Cada día se quitan la vida al menos 40 personas en Corea del Sur.