Es el segundo en una semana. Al menos 22 personas han fallecido y 500 han resultado heridas a causa de un terremoto de magnitud 6,8 en la escala de Richer registrado este sábado en el distrito de Awaran, situado en la región de Baluchistán, en el suroeste de Pakistán, según ha informado este domingo la emisora estatal paquistaní.

Cientos de viviendas se han derrumbado solo en Awaran a causa de este nuevo seísmo que, según el Instituto Geológico de Estados Unidos, ha sido de una intensidad de magnitud 6,8, el epicentro ha sido localizado a 96 kilómetros al noreste del distrito de Awaran y el hipocentro a 14 kilómetros de profundidad.

El Centro Nacional Sísmico de Pakistán, por su parte, ha estimado que la intensidad del seísmo fue de 7,2 y registró su epicentro a 150 kilómetros al suroeste de la localidad de Juzdar.

Alrededor de una quincena de áreas se han visto afectadas por los temblores, donde se han sucedido el derrumbe de casas. Los equipos de rescate están tratando de llegar a las zonas asoladas por el seísmo, según el portavoz del gobierno de Baluchistán, Jan Muhamad Buledi.

Entretanto, son los residentes y trabajadores locales los que están tratando de rescatar a las personas atrapadas entre los escombros, a la espera de que lleguen los efectivos. Según el comisario adjunto del distrito de Awaran, Rashid Baloch, las vías de comunicación con esta zona han quedado destruidas a causa del terremoto.

Por el momento, 64 personas han logrado ser trasladadas a la ciudad de Karachi para recibir tratamiento por las múltiples heridas sufridas durante el sismo, según la cadena paquistaní Geo TV, dado que los centros sanitarios en Awaran han quedado derruidos.

Este es el segundo seísmo que se produce en esta zona del país en lo que va de semana. En el primero de ellos, registrado el pasado martes, de magnitud 7,7 en la escala de Richter, al menos 515 personas perdieron la vida.