Imagen
Las excavaciones realizadas por arqueólogos del Instituto Francés de Arqueología Oriental en el patio del templo, revelaron el hallazgo de dos esculturas representadas en un sacerdote devoto al dios Montu y un escriba de "inm-hob" que tienen más de 3 mil 500 años de antigüedad.

Dos estatuas faraónicas de 3 mil 500 años de antigüedad, fueron descubiertas por expertos franceses en un templo donde se rinde culto al dios de la guerra Montu, que data del 1539-1075 a. C, del Imperio Nuevo, en la zona arqueológica de Luxor en Arment, sur de Egipto.

El ministro egipcio de Antigüedades, Mohamed Ibrahim, informó que las excavaciones realizadas por arqueólogos del Instituto Francés de Arqueología Oriental en el patio del templo, revelaron el hallazgo de dos esculturas. "Una representa a un sacerdote de alto rango y a la otra se le observó grabado el nombre y la profesión de "inm-hob", uno de los escribas del templo", explicó.

La primera figura esculpida en piedra diruita, mide 69 centímetros de alto y simboliza a un sacerdote con vestimenta religiosa. El jefe del Departamento de Egiptología, Mohamed Abdel Maqsud, indicó que está aferrado a una mesa de ofrendas que tiene dos cabezas de halcones, que simbolizan a Montu y tiene grabados textos religiosos escritos en jeroglífico.

La figura del escriba, es de pieza de caliza y gran dimensión, muestra un sarcófago y una estatuilla de Montu.

Los expertos se han dedicado a estudiar el templo Luxor con el apoyo de arqueólogos del Instituto Francés de Arqueología Oriental y de la Universidad francesa de Montpellier, un centro de estudios franco-egipcio dedicado al estudio de los templos de Luxor, desde que comenzó a construirse en el Imperio Medio (1975 -1640 a.C).

Cuando el templo fue ampliado por varias dinastías en la época griega, los expertos empezaron a explorar sus estructuras para conseguir pistas sobre figuras faraónicas que simbolicen las obra del dios Amón.

En Octubre, un equipo de arqueólogos egipcios y alemanes descubrieron una estatua de Ramsés II, que es uno de los faraones del denominado Imperio Nuevo.

La pieza, de más de 3 mil años de antigüedad, fue hallada en la provincia de Sharqiya, al norte de Egipto, y en ella aparecen también inscripciones jeroglíficas con los nombres de otros dioses.