Traducido por Kanijo

En 2007, la profesora holandesa de biología de secundaria, Hanny van Arkel, observó algo misterioso en el cielo nocturno. Navegando a través de Galaxy Zoo, una base de datos on-line configurada para lograr la ayuda del público para clasificar galaxias, llegó a una brillante mancha verde de luz a aproximadamente 650 millones de años luz de distancia. El objeto, conocido como Hanny's Voorwerp (objeto, en holandés), es uno de los objetos más misteriosos del universo. Ahora, imágenes detalladas del Telescopio Espacial Hubble y observaciones en rayos-X presentadas en la 217 reunión de la Sociedad Astronómica Americana, pueden confirmar finalmente qué es.
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Las imágenes iniciales del Hanny's Voorwerp por parte de un amplio rango de telescopios en tierra y en el espacio, indicaron que era una gigantesca nube de gas caliente. Los astrónomos especularon que el brillo podía deberse a la irradiación de una galaxia cercana conocida como IC 2497. La idea es que la galaxia alberga un agujero negro gigante en su núcleo que se tragó gas y estrellas, emitiendo dos chorros de gas opuestos y radiación de alta energía. Las galaxias tan activas se conocen como quásares. Cuando la radiación procedente de este objeto impactó con la nube de gas, excitó los átomos de oxígeno, provocando el brillo verde de la nube.

Las nuevas observaciones en rayos-X, presentadas por el astrónomo de la Universidad de Yale Kevin Schawinski, revelan que el quásar ya no está activo, probablemente debido a que el agujero negro agotó su comida. Pero los científicos creen que se paró hace poco, debido a que el Voorwerp sigue brillante. Dado que la luz emitida desde IC 2497 necesita decenas de miles de años para llegar al Voorwerp, los astrónomos especulan que el quásar debe haberse apagado hace menos de 200 000 años. Esto significa un final mucho más rápido de lo que pensaban los científicos que era posible.

Las nuevas observaciones de Hubble, obtenidas en abril de 2010, también confirman la hipótesis del quásar muerto. En particular, revelan cúmulos de jóvenes estrellas en el Voorwerp, algunas de no más de un millón de años; son las áreas amarillentas en la parte superior derecha del objeto. De acuerdo con el astrónomo y líder del equipo William Keel de la Universidad de Alabama en Tuscaloosa, la presencia de estas jóvenes estrellas indica que los chorros de partículas de movimiento rápido - que son eyectadas desde los quásares - bombardearon la nube de gas. Como resultado, el gas se comprimió y se formaron nuevas estrellas.

Otras medidas de Hubble revelaron una burbuja de materia en expansión en el núcleo de la galaxia. "Tanto el cúmulo estelar en el Hanny's Voorwerp como la burbuja en expansión en el núcleo de la galaxia, apuntan a un potente flujo de salida de gas, fomentado por el quásar", dice Keel.

Las nuevas imágenes del Hubble son las observaciones más detalladas de una galaxia que aloja a un quásar jamás tomadas, dice Schawinski. La mayor parte de los quásares están mucho más lejos, y normalmente las galaxias madre no pueden estudiarse bien debido a que la luz del quásar en abrumadoramente brillante. Además, dice, el rápido apagado observado del quásar IC 2497 ayudará a los astrónomos a comprender la física de los festines de los agujeros negros supermasivos.