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Erick Gelhaus, el oficial de policía del condado de Sonoma (en California, oeste de EE.UU.) que disparó el año pasado contra un adolescente hispano que andaba por una calle de la ciudad de Santa Rosa con un rifle de juguete en la mano, no enfrentará cargos criminales, anunció el lunes el fiscal Jill Ravitch.

Según el anuncio de la Fiscalía de Sonoma, Gelhaus disparó a Andy López, de 13 años, porque el niño representaba una amenaza contra su vida y otros.

La decisión del fiscal de Sonoma provocó la tarde del lunes una gran marcha de protesta en las calles de Santa Rosa.

La familia de la víctima ha asegurado que demandará a Erick Gelhaus por violar los derechos civiles de su hijo.

El trágico incidente tuvo lugar el 22 de octubre de 2013, cuando Gelhaus, un veterano de la guerra de Irak de 48 años que realizaba una patrulla con su compañero, disparó siete veces contra un niño que paseaba de noche con un arma de juguete en la mano.

Las autoridades policiales aseguran que los agentes confundieron con un fusil militar la réplica que el joven portaba.

La muerte del joven hispano ha generado masivas protestas en todo el condado de Sonoma. Los manifestantes han denunciado, en reiteradas ocasiones, la presión, el maltrato y la discriminación racial que sufren los migrantes, especialmente los hispanos en EE.UU.