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El primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, pidió más ayuda a Estados Unidos para negociar un cese el fuego en Gaza, ha afirmado este martes el secretario de Estado estadounidense, John Kerry.

"Anoche conversamos y el primer ministro me habló de una idea y una posibilidad de un cese el fuego. Él lo mencionó, como lo ha hecho en forma consistente", revela Kerry respecto a su conversación telefónica mantenida la noche del lunes con Netanyahu.

En otra parte de sus declaraciones, ha hecho caso omiso a los ataques de los medios israelíes que lo acusan de rendirse al Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) como consecuencia del fracaso de sus labores de mediación, durante su viaje a Oriente Medio la semana pasada, para alcanzar un cese al fuego entre los combatientes palestinos y el ejército israelí.


Comentario: Es posible que esto sea un teatro realizado para intentar disminuir un poco las reacciones negativas del público en general, derivadas de la limpieza étnica sionista, donde han muerto en su mayoría civiles y un alto porcentaje de niños. No se deje engañar, nada sale de sus planes y EEUU los apoya y patrocina.


"No voy a preocuparme por ataques personales", ha indicado Kerry, al tiempo que ha recordado sus esfuerzos para evitar que el conflicto derive a una situación donde ambas partes "tengan dificultades para encontrar una solución".

Según Kerry, de haber un acuerdo para iniciar negociaciones serias sobre los asuntos de fondo, ello ocurriría en El Cairo, capital de Egipto, "sin condiciones previas, y no perjudicaría la capacidad de Israel para defenderse".

Así el jefe de la Diplomacia norteamericano reitera la posición de Washington ante las atrocidades israelíes contra la Franja de Gaza, es decir, justificando los ataques contra el asediado pueblo palestino como el derecho de este régimen a defenderse.

El régimen de Israel, a pesar de ser el que ha dado el primer disparo en esta guerra y de haber causado el baño de sangre en Gaza, no es capaz de salir de este nuevo aventurismo por eso ha movilizado a todos sus aliados a fin de obligar a la Resistencia a aceptar una tregua.

Entre tanto, la parte palestina insiste en que un eventual alto el fuego debe permitir el fin del bloqueo militar y económico de la Franja de Gaza, impuesto por el régimen israelí desde 2007, así también, la apertura del cruce fronterizo del enclave costero con Egipto, el paso de Rafah.

Desde el pasado 7 de julio, el pueblo palestino una vez más vuelve a ser víctima de una brutal agresión lanzada por las tropas israelíes que, hasta el momento, ha dejado al menos 1230 palestinos muertos y otros 7000 heridos.