El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, declaró este lunes el estado de emergencia en la provincia occidental de Chiriquí para facilitar la reconstrucción de las infraestructuras afectadas por las fuertes lluvias caídas en la zona, que han causado al menos nueve muertos.
Panamá inundaciones
© Marcelino Rosario/EFELabores de rescate de las víctimas causadas por el desbordamiento del río Chiriquí.
"Aunque la situación está cada vez más controlada, convocamos el estado de emergencia en el área afectada de modo que podamos atender de inmediato la reconstrucción de infraestructuras clave como puentes, pasos y vías, de manera que la comunidad pueda movilizarse lo antes posible", indicó Varela, según un comunicado oficial.

El estado de emergencia permitirá gestionar recursos para llevar con urgencia soluciones a las áreas afectadas, dijo el mandatario al recorrer las zonas más dañadas por los deslizamientos de tierra y las crecidas de ríos en la comunidad de las Nubes, en Cerro Punta, en la provincia de Chiriquí, a 500 kilómetros al oeste de la capital panameña.

"Nos solidarizamos con la tragedia humana que golpea a los residentes, lo mas importante es dar el respaldo a los familiares de aquellas personas que han fallecido", señaló Varela, acompañado de su esposa, Lorena Castillo.

En las próximas horas se construirán las estructuras necesarias para que las personas puedan ser evacuadas de manera segura y también se levantará un vado para ayudar a los productores, precisó Varela.

La primera dama, por su parte, habilitó un centro en la Gobernación de Chiriquí para recibir ayuda para los afectados.

Se necesita comida, mantas, ropa en buen estado y zapatos para niños, toallas, agua, pañales desechables y leche en polvo para bebés, según las informaciones oficiales.

Al menos nueve personas han muerto, entre adultos y menores, a causa de las fuertes lluvias caídas el domingo en Chiriquí, confirmó a Efe un portavoz del Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc).

José Donderis, director general del Sinaproc, puntualizó, por su parte, en un comunicado que al menos cinco viviendas fueron arrasadas por el río Chiriquí Viejo, lo que provocó 17 damnificados.

Además, 20 viviendas sufrieron daños parciales y 120 personas se vieron afectadas por la riada, que se llevó un puente.

Por otro lado, fueron rescatadas sanas y salvas doce personas -cuatro menores y ocho adultos- que se encontraban atrapadas en un islote producto del desbordamiento del río Chiriquí Viejo.

Las decenas de damnificados y afectados se encuentran en un albergue temporal habilitado en un gimnasio.

De acuerdo con los pronósticos meteorológicos, se esperan más lluvias en el oeste del país.