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Este dinero proviene del Fondo de Reserva especial creado con ingresos de los hidrocarburos del país, del que 4500 millones de euros se dedicarán al VTB, segundo banco de Rusia, mientras que el Rosselkhozbank, principal acreedor del sector agrícola, recibirá 520 millones de euros.
A finales del pasado mes de julio, la Unión Europea (UE) decidió restringir el acceso al mercado de capital de estos dos bancos rusos, junto a otros tres más, el Sberbank, el Gazprombank y el Vnesheconombank (VEB), en el marco de las sanciones financieras impuestas a Moscú por la crisis en Ucrania.
Estas sanciones prohíben la compra, venta o prestación de asistencia en la emisión o cualquier otra forma de negociación en relación con bonos, obligaciones, acciones o instrumentos financieros similares, con un vencimiento a más de 90 días emitidos después del 1 de agosto de este año en curso, por estas cinco entidades rusas.
El paquete de sanciones de los Veintiocho también incluye un embargo a la importación y exportación de armas y material relacionado, cubiertos en la lista común militar de la UE a Rusia para "nuevos contratos", igual que la prohibición de vender, suministrar o transferir bienes y tecnologías de uso dual para "usuarios finales militares" o "uso militar".
Varios sectores rusos se han convertido en objeto de las sanciones de Estados Unidos y algunos países europeos tras la reunificación de la península de Crimea (al sur de Ucrania) al territorio ruso, mediante un referéndum celebrado el pasado mes de marzo. El Occidente acusa a Moscú de violar la integridad territorial de Ucrania, alegato rechazado por Rusia.
Comentario: En otras palabras, estas sanciones no afectan demasiado a Rusia, ya que cuenta con los fondos necesarios (y más) para hacer frente a las supuestas pérdidas. ¿Pero puede decirse lo mismo en lo que a la UE respecta? Siguieron las órdenes de Washington sin pensarlo dos veces, y ahora están muy probablemente en aprietos.