bombas_paz_siria
Traducción por Ivana Cardinale

El gobierno de Barack Obama se está preparando para iniciar ataques aéreos en territorio sirio sin el consentimiento del gobierno de Bashar al Assad. El pretexto es la guerra en rápida expansión de Estados Unidos contra el Estado Islámico (ISIS), pero de hecho, este es el tan deseado ataque de Estados Unidos contra Siria que fue temporalmente frustrado por oposición popular el año pasado.

La idea de que la oposición del público a los planes de Obama de atacar Siria el año pasado detuvo las bombas, parece ser más ilusión que realidad, considerando lo fácil que ha sido estas dos últimas semanas destruir cualquier oposición en el pueblo estadounidense al mismo plan de ataque que Estados Unidos regurgitó casi exactamente un año después.

Son una serie de historias salaces sobre la masacre del ISIS a una minoría de Yazidis, que nadie nunca había oído hablar, para movilizar la opinión pública de Estados Unidos a favor de ataques iniciales estadounidenses e incluso tropas terrestres en Irak. No importa si las historias fueron promocionadas y mayormente falsas. No importa que Estados Unidos y sus aliados han armado y entrenado a los individuos que ahora se llaman así mismos ISIS (ahora simplemente "IS") por varios años. Otra historia de "bebés lanzados de sus incubadoras" e incluso autoidentificados como no intervencionistas, estaban gritando por bombardeos.

Entonces se presentó el video publicado pretendiendo ser la decapitación del periodista freelance estadounidense (y ex contratista de la USAID) James Foley. Aunque el video no mostró una decapitación real, escépticos sin embargo fueron silenciados por amonestaciones para sumarlo al dolor de la familia al cuestionar la línea oficial del gobierno de Estados Unidos. Los videos fueron retirados febrilmente de los medios de comunicación antes que muchos tuvieran la oportunidad de ver que los mismos no mostraron una decapitación en absoluto.


Para el momento que los medios comenzaron a darse cuenta de que el video era una falsificación, la opinión pública ya se había posicionado a favor de sacar a ISIS del lugar donde buscaron refugio.

Debido a que ISIS, entrenado por Estados Unidos, también opera en Siria (donde están combatiendo por el objetivo de Estados Unidos de un "cambio de régimen"), ahora debe ser atacado por Estados Unidos. El ministro de Relaciones Exteriores de Siria, Walid al-Moallem, le recordó a Washington el miércoles que su gobierno debe ser consultado antes que Estados Unidos inicie acciones militares en territorio sirio. Moallem fue ignorado por Washington, que comenzó a enviar aviones no tripulados sobre territorio sirio.


Comentario: Típico de Estados Unidos, ignorar el derecho internacional y la soberanía de los pueblos atribuyéndose a sí mismos el rol de policías del mundo, excepcionales y, por lo tanto, no sujetos a la ley a la que están sujetos los demás países del mundo.


Ahora se nos dice que lo único que frena las bombas estadounidenses en suelo soberano sirio es la preocupación de que cualquier ataque sería percibido como un cambio en la política de Estados Unidos lejos de las demandas por un "cambio de régimen" en Siria. En otras palabras, el gobierno de Obama no quiere ser visto ayudando a un gobierno sirio, que ha estado batallando contra lo que ahora se llama IS durante tres años, también bombardeando al IS en Siria.

Preocupaciones de que un ataque de Estados Unidos en Siria sin permiso sería una violación del derecho internacional, de la carta de la ONU y sería un descarado acto de agresión, no se consideran en el proceso de toma de decisiones de Estados Unidos. Tampoco es el hecho de es poco probable que el Congreso se moleste en declarar la guerra o incluso aprobar una autorización para el uso de la fuerza en contra de Siria.

Actualmente no hay legislación activa que permitiría al presidente Obama hacer la guerra contra Siria.

Estados Unidos ya está violando el territorio sirio conduciendo vigilancia aérea para determinar objetivos para ataques aéreos planeados. Esta violación de soberanía es ignorada por el mismo gobierno estadounidense que condenó la entrega de alimentos y agua para aquellos que sufren en el oriente de Ucrania como una "flagrante violación" de la soberanía de Ucrania.

Alimentos y agua para civiles desesperados es una flagrante violación de soberanía, los ataques aéreos a Siria no lo son. Esta es la lógica del gobierno de Estados Unidos, pero virtualmente no hay oposición entre los formadores de opinión, los medios de comunicación o políticos.

Este mes el gobierno estadounidense admitió que habían más de 12.000 combatientes extranjeros - yidajistas - dentro de Siria buscando derrocar al gobierno de Assad. Quizás sin darse cuenta, este reconocimiento socava toda la razón de ser de tres años para la política de Estados Unidos de "cambio de régimen" en Siria. Recordemos que la postura de "Assad debe irse" del gobierno de Estados Unidos fue justificada por las supuestas afirmaciones de que el pueblo sirio estaba participando en una revuelta popular para establecer un autogobierno y la democracia. Esto no puede ser cierto si de hecho esta guerra ha sido librada por yidajistas extranjeros.

La guerra contra Siria está quizás a pocos días. Será una guerra ilegal, sin una resolución de la ONU o permiso del gobierno sirio, sin el Congreso estadounidense. Conducida por el presidente de la paz.