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  • Consumers for Dental Choice, dirigido por el abogado de Washington Charlie Brown, conduce una campaña nacional e internacional contra las amalgamas dentales, promocionadas engañosamente como "empastes de plata" a pesar de ser principalmente mercurio
  • El Convenio de Minamata Sobre el Mercurio, firmado por los Estados Unidos el pasado noviembre, requiere que cada nación disminuya el uso de amalgamas. Este enfoque nos puede guiar hacia una odontología libre de mercurio, lo que es un increíble beneficio para la salud personal, salud pública, salud ocupacional y para nuestra hermosa naturaleza
  • Consumer Dental for Choice trajo el tratado a casa para desafiar al gobierno estadounidense para que cumpla con la promesa que hizo cuando firmó el tratado. Consumer realizo un encuesta, después emitió un reporte llamado "Measurably Misleading" (Notablemente Engañoso) que muestra que la FDA es en donde se origina el problema
Hoy lanzamos la cuarta Semana de Odontología Libre de Mercurio. Nos preparamos para trabajar una semana completa para terminar con el uso de las amalgamas dentales - una guerra civil primitiva sobre un contaminante que daña los dientes - por tres razones:
  1. El nuevo Convenio de Minamata Sobre el Mercurio es quien podría cambiar las reglas del juego sobre las amalgamas dentales. Cada nación que firma este tratado global contra la contaminación por mercurio - que ahora suman 100, incluyendo a los Estados Unidos - se compromete a disminuir el uso de mercurio dental sin demora.
  2. Consumers for Dental Choice, quien encabeza la campaña contra las amalgamas, trajo a casa el Convenio de Minamata. Y llevaron a cabo una encuesta Zogby, después emitieron un dictamen cruel en donde la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) oculta a los padres y consumidores el mercurio en las amalgamas - poniendo al gobierno de Estados Unidos fuera del juego al romper el compromiso que adquirió en Minamata.
  3. Ahora el Consumer for Dental Choice necesita de su apoyo financiero. Al trabajar con los líderes del medio ambiente, consumidores y de la salud, Consumers for Dental Choice está lanzando campañas que eliminen el uso de amalgamas en Europa, Asia, África y América Latina.
Han duplicado sus esfuerzos en los Estados Unidos, a través de una estrategia de campaña brillante de la cual hablaremos a continuación.
Cambiemos las reglas del juego para convertir a la odontología en un sistema libre de mercurio
Hacer que las amalgamas fuera el tema en el convenio sobre el mercurio fue toda una hazaña. Con negociaciones de Minamata a punto de comenzar en Estocolmo hace cuatro años, Charlie Brown, fundador de Consumers for Dental Choice, invitó a los líderes ambientales, de salud y grupos de consumidores a unirse bajo una enorme carpa.

Lo hicieron, al forman la Alianza Mundial para una Odontología Sin Mercurio - y eligieron a Charlie como su presidente. Con 11 vicepresidentes regionales y grupos sin fines de lucro en decenas de naciones, abarcaban el mundo.

Grupos dentales libres de mercurio procedentes de América del Norte, Europa, África y Australia se unieron a la coalición, y los dentistas a menudo sirven como portavoces durante las sesiones de negociación. A excepción de un grupo dividido de una academia dental sede en Estados Unidos, todos trabajaron juntos desde principio a fin - y obtuvieron resultados.

La Alianza Mundial para una Odontología Sin Mercurio trabajó ardua e inteligentemente y superó a la empresa financiada World Dental Federation, integrado por la Asociación Dental Americana y otros grupos pro-dentales de mercurio.

El Anexo A del Convenio de Minamata incluye un mandato para reducir el uso del mercurio dental, con la fecha de inicio inmediata. Proporciona una ruta sobre cómo hacerlo. Cualquier nación puede hacer más - eliminar las amalgamas en una fecha específica - y Consumers for Dental Choice ha comenzado esas campañas en varias naciones. Siendo las amalgamas un anexo en lugar del texto principal, una futura enmienda podría dar lugar a la eliminación gradual en todo el mundo.

Charlie Brown asistió a una reciente reunión con el Departamento de Estado de Estados Unidos, donde un oficial de alto rango le aconsejó que, tras la firma del Convenio de Minamata, un número de naciones estaban hablando de su contenido.

Ellos expresaron su sorpresa de que las amalgamas fueran parte del Convenio, ya que se esperaban que los grupos de intereses especiales tuvieran éxito al desecharla. Cuando Charlie agradeció diplomáticamente el Departamento de Estado: "¡Oh, no, no fue el gobierno quien incluyo las amalgamas en el tratado; fueron los grupos sin fines de lucro."

Sabemos que el activismo puede funcionar. Se trabajó con Minamata. Y ahora, Minamata está en casa.
Una encuesta, un informe y un dictamen cruel donde la FDA apoya los empastes de mercurio
Los llamados "rellenos o empastes de plata" son un fraude masivo para el consumidor. Incluso en el siglo 19, los médicos respetados condenaron el término, señalando que el término fue utilizado para ocultar el mercurio.

Los apologistas afirman que se refiere al color, pero cuando alguien dice "plata," por lo general significa al metal (la primera definición de plata en el diccionario), no el color (que es la cuarta o quinta definición en el diccionario). El término "empaste de oro" seguramente no se refiere al color; se refiere al metal.

Cuando se produce el fraude al consumidor en la medicina y la salud, la mayoría de las personas en Estados Unidos asumen que la FDA podría intervenir para corregir la situación. Pero no, la FDA está a favor de la industria dental, que desea hacerlo creer que los empastes de amalgamas son de plata, no de mercurio.

Incluso la palabra "amalgama" es ambigua. Puede significar un metal con mercurio o puede significar un metal sin mercurio. De acuerdo con la encuesta de Zogby, llevada a cabo por Consumers for Dental Choice, las personas son gravemente engañadas por las palabras "empastes de plata" y "amalgama."
El 57 por ciento de las personas en Estados Unidos no saben que las amalgamas contienen mercurio
Consumers for Dental Choice realizó una encuesta con la firma Zogby Analytics de gran reputación. Los resultados no pueden sorprender a nuestros lectores: menos de la mitad (43 por ciento) de las personas en Estados Unidos sabía que el mercurio era el componente principal de las amalgamas. El 57 por ciento restante dio una respuesta incorrecta o no sabía que las amalgamas contenían mercurio contenido.

¿A qué se debe eso? En primer lugar, los dentistas en general no informan a las personas. Sólo el 11 por ciento nunca recordó haber escuchado a su dentista decir que las amalgamas contienen mercurio. En segundo lugar, el término "empastes de plata" es un fraude a los consumidores. De hecho, una cuarta parte de los encuestados nombró a la plata como el principal componente de las amalgamas. Los consumidores están molestos de que el gobierno permita que este engaño continúe, y le pidieron tomar acciones para detener que las amalgamas sigan siendo comercializadas como "plata."

Con los hallazgos apoyados por cinco organizaciones nacionales en los campos sobre la protección al consumidor, la salud, el medio ambiente, y defensores de las minorías, Consumers for Dental Choice ha emitido un nuevo informe llamado Measurably Misleading,1 que explica los resultados de la encuesta y revela cómo la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA ) y la industria dental de los Estados Unidos lo engañan sobre el mercurio.

La gente tiene el derecho absoluto de saber que los empastes de amalgama contienen mercurio--aunque hayan aceptado que se les pusiera una. Pero el mercurio entra en la boca de las personas, porque la industria dental está ocultando el hecho de que la amalgama contiene mercurio. Si bien esta encuesta no excluye a los dentistas apáticos, identifica el culpable principal: la FDA.

¿Por qué? Debido a que la FDA es el sistema regulatorio de los Estados Unidos. El objetivo de la FDA es protegernos de prácticas engañosas, falso etiquetado, etiquetado engañoso y otras prácticas de marketing engañosas en la asistencia sanitaria. Las propias normas de la FDA dicen que el mal etiquetado ocurre por "identificación incorrecta, inadecuada o incompleta." La FDA podría actuar para informar a los consumidores sobre los empastes dentales de mercurio, pero no lo hacen. En lugar de ello, la FDA llama a las amalgamas "rellenos de plata" en su propio sitio web. Es hora de que la FDA detenga el engaño y empiece a tomar las riendas. La FDA debe decir la palabra "M," Mercurio - y asegurarse de que todos los padres y todos los consumidores que entren a una oficina dental sepan que los empastes de amalgama son en realidad empastes de mercurio.

Claro, las cosas han mejorado. Cuando Charlie fundó Consumers for Dental Choice, sólo tres por ciento de los dentistas no usaban mercurio. La organización de Charlie ha sido fundamental para catalizar el cambio en la industria. Hoy en día, más del 50 por ciento de los dentistas en Estados Unidos han dejado de utilizar las presentaciones de mercurio. Eso es un gran avance. Pero aún nos queda un largo camino por recorrer para poner fin a esta práctica arcaica de poner mercurio en los dientes de las personas. Por desgracia, parece que nos hemos estancado en el 50 por ciento de los dentistas que todavía insisten en el uso de amalgamas.
Creemos que los dentistas pro-mercurio se han estabilizado porque no van a aprender nada nuevo y las ganancias son muy rentables," dice Charlie.

"Ellos están ocultándole a los pacientes que las amalgamas es un empaste de mercurio. Quien promueve la odontología pro-mercurio o del mercurio dental es la FDA. La FDA les dice a los dentistas y a los fabricantes, 'Usted puede ocultar el mercurio de los pacientes. No tiene que decirles y como resultado, ellos se lo ocultan.
Tenemos un excelente equipo con un gran logro. Ayúdenos a mantenernos.
¿Por Qué la FDA Se Opone a Ejercer la Ley Contra el Mercurio Dental?

¿Por qué la FDA se opone tanto a informar al público sobre la verdadera naturaleza de las amalgamas? La respuesta es simple: porque la agencia ha entrado por la puerta giratoria que es tan común en otras industrias. Al igual que Monsanto penetró las agencias reguladoras del gobierno federal, los centros de beneficio de amalgama han penetrado y presionado eficientemente a la FDA para que se mantenga complaciente referente a esta cuestión.
Es la burocracia superior," explica Charlie. "En la parte superior esta la puerta giratoria de las personas que vienen del mundo corporativo, que trabajan por un corto tiempo, no son responsables de nada, sólo tienen un título y luego regresan nuevamente al mundo corporativo. Eso es un grupo. A nivel empleado se encuentra una burocracia permanente, que es impermeable. Ellos no le hacen caso a nadie. Es en realidad un excelente trabajo.

Ellos hacen lo que quieren. Ellos no son supervisados ​​por líderes corporativos. En este caso, la burocracia de la FDA está a favor de las amalgamas. Increíblemente, las decisiones dentales no son hechas por los toxicólogos. El mercurio es una neurotoxina horrible. Es capaz de dañar permanentemente el cerebro de los niños en desarrollo, y sin embargo tienen a un dentista a cargo de este problema, un dentista que le gustan las amalgamas.
Hay también una preocupación demográfica cuando se trata de la distribución de información. Charlie ha encontrado que las personas que ganan 50,000 dólares al año o menos (según la encuesta realizada por Zogby) son tres veces menos probables a saber sobre el problema del mercurio por sus dentistas que las personas que hacen más de 50,000 dólares al año. La misma tendencia se encuentra entre las líneas raciales, con los afroamericanos y otras minorías que son menos propensas a obtener la verdad por sus dentistas. El Congreso Nacional de Indios Americanos (NCAI) ha pedido al Servicio de Salud Indígena (HIS) detener el uso de amalgamas en las reservas indígenas. Así que la gente está empezando a despertar y a presionar cada vez más. "Eso es lo que tenemos que hacer. Puede y lo haremos funcionar," dice Charlie