Contrariamente a lo que nos dicen orgullosamente los dioses ideológicos de la modernidad (la democracia, la igualdad, el capitalismo, etc.) hoy en día existen una gran cantidad de esclavos - personas que más allá de en teoría ser libres, experimentan su vida desde la esclavitud, forzosamente desempeñando trabajos que merman su salud sin poder de elegir hacer otra cosa. Actualmente se calcula que existen 27 millones de esclavos. Personas de bajos recursos que son explotadas en las industrias de la manufactura de gadgets y vestimenta, la minería de diamantes y otros minerales raros, en la construcción de ciudades para multimillonarios en el desierto o forzadas a trabajar en la prostitución.
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El sitio Slavery Footprint realiza una loable labor computando datos de organismos internacionales siguiendo la cadena de elaboración de más de 400 productos de consumo global para calcular la inadvertida cadena de esclavitud en la que participamos como consumidores. Puedes ahí calcular el número de esclavos a los cuales empleas indirectamente según tu tipo de alimentación, tu uso de aparatos tecnológicos, adquisición de joyería o vestimenta. Aunque el cálculo difícilmente es exacto, sirve para darnos una idea del tipo de economía en el que estamos inmersos y de cómo nuestros actos de consumo - en una falsa distancia - afectan prácticas inhumanas que se realizan en países del otro lado del mundo. También para tomar conciencia de cómo populares marcas que nos atraen tanto con sus brillantes productos simplemente se desentienden de la responsabilidad que tienen al utilizar materiales y componentes que son ensamblados bajo condiciones de esclavitud.

Los datos son alarmantes, muestran que la esclavitud está en todo el mundo pero sobre todo en países tercermundistas y en China. Los datos informan que niños de Pakistán empiezan a trabajar a la edad de 13 años. En el sur de Asia una exportadora de camarones hace laborar a sus trabajadores un promedio de 20 horas al día, para tener peladas 40 toneladas diarias de camarón. Los que intentan escapar son amenazados con violencia o alguna clase de abuso sexual.