Un video grabado por un vecino del parque del Pou de la Figuera -más conocido como Agujero de la Vergüenza (Forat de la Vergonya)- muestra cómo cuatro agentes de la comisaría de Ciutat Vella dan puñetazos y patadas a un joven que les reclamaba que se identificaran.

Reincidencia en la violencia policial en el distrito de Ciutat Vella de Barcelona. Los hechos ocurrieron este miércoles 28 de enero a las diez y media de la noche en el parque del Pozo de la Higuera, cuando un joven de veinte años era identificado por una pareja de agentes de una patrulla motorizada de Mossos d'Esquadra adscritos a la unidad de seguridad ciudadana. "Yo pasé por el lado, hacía diez minutos que el chico estaba retenido, los agentes le pidieron el DNI para identificarlo", así comienza el relato que vio y vivió un residente en la zona, testigo de los hechos , que añade que estos episodios de identificación aleatoria son muy comunes y "generan malestar entre el vecindario". Una vez finalizada la "filiación", el joven se dirigió a los agentes para reclamarles que le mostraran su número de placa. Los policías se negaron y, cuando el chico ya se iba, poco después de que llegara otra pareja de agentes en un coche patrulla, comenzó la agresión..


En ese momento, de manera muy brusca -tal como muestran las imágenes del vídeo- los cuatro agentes se abalanza sobre la víctima cogiéndola por la cabeza y retorciéndole el cuello, mientras le propinan puñetazos y patadas. Varias vecinas de la zona comienzan a llamar "asesinos, asesinos", "estáis grabados, os está grabando todo el barrio", "hijos de puta", mientras se escuchan los gritos y gemidos del chico. A lo largo de dos minutos de grabación, se ve como desde los balcones algunas vecinas continúan gritando contra los policías y, desde la calle, una chica intenta acercarse a los agentes para recriminarles la desproporcionada acción, pero su compañero la coge del brazo para disuadirla. En la escena aparece una tercera pareja de agentes y es entonces cuando lo introducen, esposado, en el coche patrulla.
A lo largo de dos minutos de grabación, se ve como desde los balcones algunas vecinas continúan gritando contra los policías
Todo ello pasa a pocos metros de donde hace nueve años se vivió el grave episodio relatado en el documental Ciudad Muerta. De hecho, los agentes actuantes pertenecen a la unidad de seguridad ciudadana de la comisaría de Ciutat Vella, un subgrupo de la policía que se hizo tristemente conocido por la paliza mortal a Juan Andrés Benítez. Este jueves por la tarde, veinte horas después de los hechos, dos vecinos del parque del Pou de la Figuera consultados por la Directa aseguran que el chico vive en el barrio, tiene veinte años y que no han sabido nada más de él y de su estado de salud desde ayer, "suponemos que todavía está detenido".