Dynel Lane, la enfermera estadounidense de 34 años que el pasado 18 de marzo secuestró, golpeó y abrió en canal a la embarazada Michelle Wilkins y removió su feto de siete meses, se librará de comparecer ante los tribunales como una presunta asesina, ha adelantado El Denver Post.

La razón es que las leyes de Colorado no consideran que el feto sea una persona en tanto en cuanto sea incapaz de sobrevivir un mínimo de tiempo fuera de la madre.

Las razones de la fiscalía serán explicadas hoy viernes en una conferencia de prensa a cargo del fiscal del distrito, Stan Garnett.
dynel lane
© Twitter @Denverchannel

Lane sí responderá, entre otros cargos, por intento de homicidio en primer grado.

Los hechos, que han conmocionado a la opinión pública estadounidense, tuvieron lugar en Longmont, cuando Michelle Wilkins, de 26 años, acudió a la casa de una desconocida que anunciaba ropa de bebé en la conocida web Craiglist. Una vez en el interior de la vivienda, Lane atacó a la madre de forma salvaje y cuando logró inmovilizarla, le practicó en vivo una cesárea.

A punto de desangrarse, Wilkins pudo al menos encerrarse en otra habitación, desde la que llamó a la policía.

Instantes antes de que los agentes se personasen en el domicilio había llegado el marido de Lane, David Ridley.

Según el Denver Post, Ridley encontró en las escaleras a Lane, cubierta de sangre, y esta le explicó que había sufrido un aborto.

Cuando entró en el interior de la vivienda halló al bebé en el baño, y, según su testimonio, todavía respiraba.

Para verificar que esto fue así serán cruciales los resultados de la autopsia.

Si el bebé hubiera expandido sus pulmones, si hubiera logrado tomar aire, Lane podría enfrentarse a la pena de muerte.