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Explicó la psiquiatra Lorena Novoa que la personalidad es esa manera que tiene el ser humano de actuar, responder, percibir ante las circunstancias de la vida, manifestaciones que vienen dadas en gran medida por el componente genético y hereditario; no obstante, el ambiente donde se desenvuelve el ser humano en las distintas etapas de su vida también es determinante.
"Existe ese comportamiento en el que el individuo se adapta a las pautas, normas que dicta la sociedad y que no trasgreden ni pasan a niveles no permitidos, se mantienen las relaciones interpersonales apropiadas, se conoce el respeto, la consideración que se tiene a los demás, todo formando parte de lo que es aceptado por las sociedades, pero esa personalidad comienza a ser patológica cuando se empieza a tener una conducta que traspasa normas, límites, que no mira lo que serían los derechos de los demás, comportamientos que tienen a mantenerse a lo largo del tiempo, porque forman parte de la personalidad que ya tiene estructurada", subrayó.
De lo normal a lo patológico
Pasar de un plano normal a uno patológico, es lo que se debe aprender a diferenciar. De hecho, el individuo con un trastorno de personalidad no lo percibe él como un trastorno, pero sí lo notan las personas que lo rodean, sus allegados, las cuales ven en este individuo a una persona difícil, complicada, que tiene muchas dificultades en el desenvolvimiento social.
"Los trastornos de personalidad están descritos en cantidades dentro de la práctica psiquiátrica, entre ellos se pueden mencionar el trastorno disocial de la personalidad, conocido también como la psicopatía y la sociopatía; además del trastorno esquizoide de la personalidad, el evitativo, narcisista y el histriónico, esas personas muy teatrales", precisó.
Explicó la doctora Lorena Novoa, que el trastorno disocial es un tipo de personalidad muy compleja, está dentro de los tipos que tienen mayores dificultades y problemas, son incapaces de ser empáticos, de ponerse en el lugar del otro, de establecer vínculos sólidos, de apreciar los sentimientos de las personas, de conmoverse, son agresivas, tienden a dañar, no tienen la capacidad de hacer introspección, de reflexión, de hacer autocríticas y aceptar que están obrando mal; sienten que el mundo debe girar alrededor de ellos, que son los que tienen derecho, que pueden llevarse a quien quiera por delante, no les importa el sufrimiento, ni el daño que puedan hacer.
Para la doctora Lorena Novoa, los trastornos de personalidad no sólo se pueden ver en personas catalogadas como delincuentes comunes, aunque en esos casos, tienen características, entendiendo que trasgreden las leyes, pero también se pueden apreciar en personas que tienen cierto estatus; es decir, cualquier persona que de repente se diga es un poco extraño, también difícil, pero si se indaga de manera profunda se pueden encontrar con personas que tienden a llevar esa doble vida: una de apariencia, de normalidad, pero si se analiza más a fondo, se puede percibir que hay mucha sombra, una parte oscura, en la personalidad del individuo.
Mucha violencia
Este comportamiento suele ir acompañado de mucha violencia, la cual debe analizarse, sobre todo en la vida doméstica, la que va en la mayoría de los casos dirigida hacia la mujer, a la familia, inflingida generalmente por el hombre, afortunadamente hay leyes que dan protección a la víctima.
Le preocupa a la doctora Nova, tanta violencia. En el caso de la pareja se utilizan mecanismos de defensa que dicen en el caso de la víctima: yo propicié que él se enojara, que me agrediera, mi comportamiento llegó a eso, entonces hay una relación complementaria, el agresor, encuentra la víctima muy vulnerable y se complementan.
-- ¿Tienen las personas disociales cura, tratamiento?
-- Siempre ha sido la cura y el tratamiento, motivo de debate, se nos ha enseñado que es muy difícil tratar a una persona psicópata, porque dentro de las características ya muy estructuradas de su personalidad, está el no ser empático, el no tener vínculos, el no manifestar esa capacidad de reflexión, entonces puede ser que no haya vuelta atrás, a veces, se tiene que hablar claro y decir: esa persona nunca va a cambiar. Otros en la parte religiosa han encontrado cierta contención, entonces se mantienen en este escenario, pero siempre hay que estar atento, subrayó la psiquiatra.
--¿Este tipo de trastorno es más frecuente en los hombres o en las mujeres?
--En los hombres, pero hay mujeres, no obstante, el mayor número son de sexo masculino---, aseveró.
--¿Cuál es el perfil de un bisocial?
-- Es una persona normal, agradable incluso se ve encantadora, por eso las personas que la rodean entran en confianza, su capacidad intelectual suele ser bastante buena, entonces tienen la capacidad de planificar a donde quieren llegar y como buen depredador, está buscando la presa que le sea más fácil.
Comportamientos a observar
Pueden empezar estos visos en el caso de las parejas, en la etapa del noviazgo, donde las personas son extremadamente celosas, controladoras; sin embargo, la otra persona va a sentirse alagada, porque cree que los celos son manifestaciones de amor, de importancia. Entonces termina con que la persona alegada asume que sí es querida, pero ¡cuidado, esto puede ser una señal de alerta y de alarma, porque luego viene otro tipo de prohibiciones, se empieza a no permitir espacio, que se tengan otros círculos; es decir, terminan siendo relaciones muy asfixiantes, cerradas y donde se tiene qué conocer todo que hace la pareja. No se respetan horarios de clase, trabajo, porque hay que marcar la presencia, el territorio.
Luego comienza otro tipo de comportamiento, hay un desvalorización, donde se maneja la frase "tu dependes de mi", "no sirves para nada", viene el maltrato emocional, verbal, hasta llegar a cualquier tipo de maltrato físico que lleva a muchas tragedias, que resultan terribles para la sociedad, la familia, siempre hay muchas personas que van sufrir las consecuencias.
Sociedad enferma
"Vivimos en una sociedad que se enferma cada día más, con tantas situaciones graves, con la pérdida de valores, del reconocimiento a la condición humana, solidaridad, de entender que somos seres humanos, que se necesitan un trato digno, que tienen sentimientos, sueños, metas, aspiraciones, nadie tiene el derecho de cortar estas situaciones", dijo.
En tal sentido manifestó la doctora Lorena, que la familia está desestructurándose mucho, los niños se sienten muy solos, abandonados; los padres viven en una situación que es entendible, porque se tienen obligaciones laborales, necesidades, pero se dejan a los hijos muy a la deriva, se enfocan los progenitores en mantenerlos ocupados porque no pueden dedicarles tanto tiempo y terminan abandonándolos y cortando la comunicación.
Cercanía de cuidado
A los niños se le debe plantear que pueden existir muy cerca de ellos personas que pudieran en algún momento agredirlos, abusar de ellos, situación que no puede ser posible, nadie puede acercarse a ellos por muy familia, muy cercano que sea, no puede tener un contacto fuera de lo que sería permitido, enseñándoles en primer término qué es y lo no permitido.
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