Centenares de jóvenes recorrieron este miércoles las calles de Baltimore (Maryland) entre la Universidad John Hopkins hasta Penn Station de forma pacífica. Con fuerza y rabia, corearon las proclamas que se han popularizado desde la muerte de Michel Brown este verano en las que reclaman justicia para las víctimas de la violencia policial y recuerda a los agentes que no se dispara con las manos en alto.
Baltimore
Manifestantes en Baltimore
Pero en esta localidad es genuina la que reza "de noche y de día, lucharemos por Freddy Gray" (en inglés, la rima es perfecta). Pasadas las seis de las tardes, se dejaron ver a las puertas del Ayuntamiento. Esta vez no eran decenas como los que se saltaron el toque de queda del martes y provocaron momentos de tensión y el lanzamiento de gases. La marea de jóvenes bajaba rápido hacia el edificio "del pueblo, nuestra casa" decía uno de los portavoces por un megáfono, subido a un camión.

El grupo era interracial, compuesto mayoritariamente por jóvenes. "Este no es un problema de la policía, ni del gobernador, ni la alcaldesa. Es nuestro problema porque vienen detrás de nosotros", decía una de las líderes estudiantiles que encabezaba la marcha con ira. Otro insistía en que estaban ahí porque quieren saber qué pasó con Gray. De hecho, varios jóvenes expresaron su preocupación por qué ocurrirá el viernes cuando se de a conocer qué ocurrió durante el traslado.

Freddie Gray
Freddie Gray
En esta ciudad, muchos sienten que son "objetivo de la policía" por su color de piel. Asi lo explicaba Nevin, un chico de 15 años miembro de un grupo de debate local que repartía flores y trataba de demostrar que los adolescentes también pueden contribuir al cambio en Baltimore. A él lo pararon hace dos años y estuvo a punto de ir al 'calabozo' por no llevar su identificación encima. Su tutora 'Miss t' se muestra orgullosa de la exposición de su alumno,que abandona la conversación para entregar flores a unos chicos negros que pululan como despistados por la zona.

Los efectivos de la Guardia Nacional -también jóvenes aunque el casco y las armas que portan les hacen aparentar más edad- y la policía están apostados ante la fachada del Ayuntamiento. Mientras llegan los estudiantes, charlan con los periodistas en un ambiente distendido. Esta tranquilidad no la rompe la llegada de la marcha ni sus comentarios.

Durante casi una hora, miembros de diferentes colectivos estudiantiles y representantes de la comunidad negra de Baltimore denunciaron la precaria situación en la que viven los jóvenes de la ciudad, el racismo, el desinterés del resto de la sociedad.... Un estudiante latino subió al camión para su apoyo. "Nosotros estamos con vosotros. Tenemos el mismo problema", dijo antes de arrancar los aplausos de los manifestantes.

Otras ciudades se suman

Este no fue la única muestra de apoyo. La muerte de Freddy Gray y la noche de disturbios -una profesora, que prefiere no dar su nombre, niega que lo fueran y denomina lo ocurrido de 'movimiento- han despertado a manifestantes de varias ciudades de Estados Unidos como Washington y Nueva York, donde sus ciudadanos se echaron a las calles por la tarde . En Manhattan se vivieron momentos de tensión mientras los manifestantes marchaban por la isla en contra de la indicación que había hecho la policía. Hay al menos 60 detenidos allí.

Poco antes de que comenzase la segunda jornada del toque de queda decretado por la alcaldesa de Baltimore Stephanie Rawlings-Blake, los neoyorquinos seguían caminando por Nueva York, donde los agentes detuvieron a algunas personas. En la localidad de Maryland, el jefe de policía Anthony Batts informó de que se habían detenido a 18 personas -dos menores y 16 adultos- a lo largo del día.

En su intervención, Batts mostró algunas de las piedras que lanzaron los jóvenes contra los agentes el pasado lunes y explicó que los detenidos de ese día habían sido todos puestos en libertad.