Las autoridades de Egipto, donde el 92% de las mujeres casadas ha experimentado la mutilación genital femenina (MGF), han anunciado un plan con el fin de reducir esta práctica abrumadora en un 10-15% durante los próximos cinco años.

mutilación genital femenina
© REUTERS/Tara Todras-Whitehil
"Es un plan ambicioso, pero ahora creo que la atmósfera política nos está apoyando y podemos alcanzar nuestra meta", ha declarado a la CNN Vivian Fouad, funcionaria del Consejo Nacional de Población que dirige el puesto gubernamental para erradicar la MGF. "Durante años estuvimos a la defensiva, pero ahora estamos a la ofensiva", ha asegurado.

Si el plan gubernamental funciona, se trataría de la primera vez en décadas cuando las mujeres "no mutiladas" superarían el número de las víctimas de mutilación genital. No obstante, erradicar esta 'tradición', que hasta la máxima autoridad islámica de Egipto condenó como "antiislámica" y "bárbara", no parece muy fácil. A día de hoy la mayoría en Egipto está convencida erróneamente de que la mutilación genital femenina responde a una obligación de carácter religioso.

Debido a esta creencia cada año un gran número de niñas se somete al "corte". La edad de las víctimas oscila entre 9-12 años. Y es justamente en el verano, cuando se lleva a cabo la mayor parte de este tipo de operaciones. La temporada se explica por una simple razón: las colegialas están de vacaciones y tienen tiempo para recuperarse en casa después de la intervención.

Entre las mujeres egipcias que sufrieron la MGF no existe una postura única respecto a la práctica. Unas, aunque a causa del "corte" experimentaron dolor y humillación, no se sienten capaces de ir en contra de las 'tradiciones' y la voluntad de sus maridos. Otras, al memorizar esta terrible experiencia para toda la vida, declaran que bajo ningún pretexto dejarán que sus hijas sufran el mismo horror. No obstante, por el momento estas mujeres representan una minoría de la población egipcia.