Un nuevo «crannog» -un tipo de masía rodeada por una muralla de estacas habitual en algunas zonas del Reino Unido- ha sido descubierta en la zona de Monmouth (al sur de Gales). Tal y como han afirmado los arqueólogos que han encontrado esta edificación, su hallazgo supone un hito arqueológico de suma importancia. Ya no solo por su antigüedad (los análisis desvelan que fue construída hace 4.900 años), sino también por el lugar en el que fue erigida (un antiguo lago de la Edad del Hielo hoy en día desaparecido).

crannog inglaterra
© MOONHOOT ARCHAEOLOGICAL SOCIETYRepresentación de un « crannog »
Así lo afirman varios medios internacionales como la «BBC», donde también se explica que el fuerte fue edificado sobre una isla artificial levantada sobre vigas de madera para evitar el ataque de las tribus nómadas de la zona. Curiosamente, este hallazgo ha llegado tan solo dos años después de que se encontrara en la misma región un primitivo puerto creado por los nativos para fabricar buques (según se tiene constancia, uno de los más antiguos del mundo). Este descubrimiento ha hecho pensar a Stephen Clarke -presidente de la Sociedad Arqueológica de Monmouth- que el lago fue una de las cunas de la civilización inglesa.

El descubrimiento

El hallazgo de esta fortaleza se realizó durante unas obras rutinarias en Monmouth. «Este es sin duda uno de los descubrimientos prehistóricos más impresionantes. Una de sus características principales es que se edificó sobre tres grandes vigas. Eran muy toscas, tenían casi la misma forma de los árboles de las que fueron sacadas y fueron fijadas en posición horizontal. Una de estas tiene un metro de ancho», explica Clarke. A su vez, estos troncos fueron cortados con una rudimentaria hacha de piedra, algo que se ha podido averiguar gracias a las marcas que se aprecian en ellos.

Encima de los troncos se creó una plataforma sobre la que, a su vez, se edificaron varias casas y una verja de madera. El resultado fue una «isla flotante» que permitía a sus habitantes defenderse de los enemigos. La antigüedad de esta construcción ha podido ser descubierta gracias a una prueba de radiocarburos realizada a su madera. Esta ha determinado que el «crannog» fue edificado hace aproximadamente 4.900 años (unos 300 veranos antes que las Pirámides de Giza) y desapareció un siglo después. Concretamente, se cree que pudo ser levantada en el año 2917 a.C., lo que la convierte en la más antigua de la zona.

Según explican los expertos, la complejidad de esta fortificación hace que pudiera pertenecer a un noble. Este habría vivido con su pueblo en tierra alimentándose de animales y frutas de un bosque cercano hasta la llegada de los enemigos. En ese momento se habría retirado con sus «súbditos» hasta el «crannog», el cual les serviría de fortaleza gracias a su foso natural. Por otro lado, los expertos han determinado que el hallazgo de esta construcción permitirá desvelar cómo vivían nuestros antepasados, su dieta y si ya habían domesticado o no determinados animales.