Operación del Kremlin junto a Irán y al régimen de Assad. Cazabombarderos realizaron 20 misiones en las últimas 24 horas. Se trata de una continuación de la ofensiva aérea lanzada el miércoles.

Siria
© ReutersVecinos observan los daños tras un ataque aéreo de fuerzas aliadas al régimen de Assad en Douma.
Cazabombarderos rusos destruyeron arsenales y un centro de comando del grupo Estado Islámico en las zonas centro y norte de Siria, en una nueva oleada de ataques aéreos realizados en las últimas 24 horas.

Según informó el vocero del Ejército ruso, mayor general Igor Konashenkov, las aeronaves de combate realizaron 20 misiones impactando nueve objetivos del Estado Islámico. Según su versión, fueron destruidos un almacén de armas y puesto de comando de Estado Islámico en el área de Raqqa, la capital de los extremistas.

En Damasco, un funcionario sirio fue citado, sin revelar su nombre, el sábado por la televisión estatal, señalando que los ataques aéreos "concentrados y precisos" destruyeron un centro de combate en la localidad de Latamneh, en el centro del país, y atacó posiciones en las áreas de Jisr al-Shughour y Maaret al-Numan, en el noroeste.

Konashenkov, en tanto, dijo se destruyeron instalaciones de almacenaje de armamento y equipamiento en ataques aéreos cerca de Jisr al-Shughour, así como un depósito de municiones en Maaret al-Numan.

El Estado Islámico no tiene presencia en la provincia noroccidental de Idlib, que incluye a Jisr al-Shughour y Maaret al-Numan.

Los ataques rusos, que comenzaron el miércoles, se han concentrado en las regiones del centro y noroeste de Siria, zonas estratégicas que son la ruta hacia el bastión del presidente Bashar Assad, en la capital, Damasco, y la costa.

Rusia asegura que los ataques son en contra del Estado Islámico y la filial de al-Qaida en Siria, pero al menos algunos de los ataques parecen haber golpeado a las facciones rebeldes que cuentan con apoyo de Occidente.