Se ha ordenado al Estado belga que levante "todas las medidas de coronavirus" en 30 días, ya que su base jurídica es insuficiente, según dictaminó el miércoles un tribunal de Bruselas.
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La Liga de Derechos Humanos había presentado la demanda hace varias semanas y cuestionaba el sistema belga de implementar las medidas mediante Decretos Ministeriales, lo que significa que se hace sin ninguna intervención del Parlamento.

El juez dio al Estado belga un plazo de 30 días para aportar una base jurídica sólida o se enfrentará a una sanción de 5.000 euros por día que se supere este plazo, con un límite máximo de 200.000 euros, informa Le Soir.

Las medidas actuales contra el coronavirus se basan en la Ley de Seguridad Civil de 2007, que permite al Estado reaccionar rápidamente en "circunstancias excepcionales", pero el juez ha dictaminado ahora que estas leyes no pueden servir de base a los decretos ministeriales.

"El juez ha dictaminado que se ha violado el principio de legalidad porque la forma actual de actuar no es lo suficientemente previsible", confirmó a VRT Kati Verstrepen, de la Liga de Derechos Humanos, quien añadió que las consecuencias "no son tan dramáticas" como para que de un día para otro las medidas dejen de ser válidas.

Por el momento, las actuales medidas contra el coronavirus no cambiarán, y el veredicto actualmente está siendo estudiado por la oficina de la ministra del Interior, Annelies Verlinden, informa De Standaard.

Todavía es posible recurrir la sentencia, pero como se trata de un juicio sumario, un recurso no suspendería la ejecución de la sentencia.

El miércoles por la tarde, la Cámara debatirá la próxima ley belga sobre pandemias, que se supone que proporcionará "una base legal permanente para tomar este tipo de medidas restrictivas durante una pandemia".

Varios expertos jurídicos ya presionaron al Estado belga para que presentara la ley lo antes posible, a fin de evitar que los jueces anularan las multas impuestas por el incumplimiento de las medidas, y esta sentencia no hace sino aumentar la presión para que se adopte rápidamente.