El ministerio palestino de Salud denunció el lunes la celebración de una reunión de la Organización Mundial de Salud (OMS) en Jerusalén, cuya parte oriental está ocupada y anexada por Israel.

Varios centenares de médicos y de miembros de profesiones de la salud efectuaron una sentada frente a la sede de la ONU en Ramala, en Cisjordania, para protestar contra la celebración en Jerusalén de esta conferencia de la OMS sobre políticas de salud en Europa.

Esta manifestación "es un mensaje al mundo para pedirle que nos hagan justicia y no recompensen a Israel por la continuación de su ocupación", declaró el ministro palestino de Salud Fathi Abou Mughli.

Para Mughli la de este acontecimiento en Jerusalén representa "una violación a las reglas de la OMS".

Según el ministerio israelí de Salud, la conferencia, que se lleva a cabo en un hotel de Jerusalén-Oeste, debe terminar el martes.

Israel proclamó a Jerusalén su capital "eterna e indivisible", mientras los palestinos quieren hacer de Jerusalén-Este, ocupada y anexada desde 1967, la capital del Estado al que aspiran.