Miles de manifestantes marcharon hoy en la ciudad griega de Tesalónica contra los nuevos ajustes anunciados por el gobierno del conservador Antonis Samaras. Por su parte, el grupo xenéfogo Amanecer Dorado destrozó puestos de venta de inmigrantes ilegales en la ciudad de Mesolongi.

En Mesolongi, al oeste del país, miembros del partido de extrema derecha Amanecer Dorado destrozaron por su parte puestos de vendedores asiáticos y africanos, informó la agencia de noticias DPA.

"O ellos o nosotros" podía leerse en las pancartas que portaban algunos de los manifestantes, que acusaron al gobierno de "obedecer a la troika (Banco Central Europeo, FMI y Comisión Europea) y llevar a la catástrofe al país y el pueblo".

Según la prensa, se trata de la mayor manifestación de los últimos meses y se produce en el marco de los nuevos recortes de 11.500 millones de euros previstos por el gobierno de Atenas como condición para recibir nuevas ayudas económicas.

En las protestas, convocadas por los dos principales sindicatos, también participaron el líder de la coalición de izquierda radical Syriza (principal partido de la oposición), Alexis Tsipras, policías y bomberos. Las autoridades desplegaron un operativo de 3.000 policías antidisturbios.

Extrema derecha

En tanto, en la ciudad de Mesolongi miembros del xenófobo Amanecer Dorado destrozaron los puestos de venta de inmigrantes ilegales asiáticos y africanos que no contaban con permisos de venta.

"Hoy pusimos orden aquí", dijo uno de los miembros del partido de extrema derecha ante la prensa. Tanto el partido socialista como el comunista condenaron estas agresiones.

Según una encuesta conocida el jueves, Amanecer Dorado superó por primera vez el 10 por ciento de apoyos y se situaría en un 10,5 por ciento, por encima del 6,9 por ciento que consiguió en las elecciones del 17 de junio. Sería así la tercera fuerza más votada del Parlamento heleno.