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Esta normativa, que es parte de un proyecto de ley ya aprobado por el senado y a punto de ser aprobado por la Casa de Representantes, es la Sección 31406 del proyecto de ley S1813 del senado (conocida como MAP-21), que ordena la instalación de "Registradores de datos obligatorio" en todos los automóviles nuevos, y legisla que sean impuestas penalidades civiles contra los individuos que no cumplan con la misma.
"A más tardar, 180 días después de la fecha de la promulgación de esta Acta, la Secretaria (de Transporte) revisará la parte 563 del título 49, código de las regulaciones federales, para requerir, comenzando con los modelos del año 2015, que los nuevo vehículos motorizados de pasajeros vendidos en Estados Unidos, estén equipados con un registrador de datos que cumpla con los requisitos bajo esa parte", indica el proyecto de ley.
Aunque el texto de la legislación indica que tales datos seguirían siendo de propiedad del dueño del vehículo, el gobierno tendría el poder de tener acceso al mismo en una serie de circunstancias, incluyendo una orden judicial (en caso de un accidente vehicular, por ejemplo), si el dueño consiente hacerlo disponible, y conforme a una investigación o a una inspección conducida por la Secretaria de Transporte.
Dado los ejemplos innumerables del gobierno y de la industria que usan ilegalmente la información - que supuestamente está protegida por la privacidad - para espiar a los individuos, esto representa otra vía más a la vigilancia total del Gran Hermano de los hábitos del transporte de cada norteamericano y de los datos de localización.
El motivo para ejercer presión a los fabricantes de autos para instalar las cajas negras en todos los coches nuevos ha estado en curso por más de una década. En el 2006, la Administración Nacional de Seguridad de Tráfico en las Carreteras alentó la idea pero no requirió a los fabricantes de automóviles instalar los sistemas.
Sin embargo, en febrero del año pasado el administrador de la NHTSA David Strickland dijo que el gobierno consideraba hacer de la tecnología obligatoria como consecuencia de la devolución de millones de vehículos de Toyota.
A principios de este año se reportó que la NHTSA podría anunciar formalmente que en todos los coches nuevos sería obligatorio tener los dispositivos para adecuarse a la ley, que ahora ha sido codificada en el MAP-21.
Como en Minority Report
La legislación, a la que se le ha dado el título Orwelliano "Acta para movilizarnos al progreso en el Siglo XXI", navegó a través del senado después de ser enormemente promovida por los Demócratas Harry Reid y Barbara Box, y también se espera que pase en la Casa de Representantes controlada por los Republicanos.
Y dado el hecho de que el mismo proyecto de ley también incluye la polémica disposición que autorizaría el IRS revocar los pasaportes de los ciudadanos acusados simplemente de deber más de $50.000 en impuestos atrasados, quitándoles sus derechos de movilidad, las cajas negras o una tecnología similar obligatorias ¿podrían ser usadas para el mismo propósito?
El reconocimiento biométrica del rostro y la tecnología de sensores que evita a una persona embriagada conducir un coche, inhabilitando el automóvil, ya se ha desarrollado, además de los sistemas que rechazan permitir que el vehículo se encienda si juzga que el conductor está extremadamente cansado.
El último escenario del Hermano Mayor sería un sistema en el que cada conductor tuviera que conseguir un permiso de facto del estado para conducir cada vez que está detrás del volante, tras una exploración del iris que demuestre que son buenos ciudadanos, que han pagado todos sus impuestos y no se han portado mal [como en el film de ciencia ficción Minority Report].
Jajaja, pues a mi me encantan los caballos así que volvere a el viejo modo de transporte con animal!!!