El gobierno brasileño indicó que en los últimos años se quitó la vida un indígena cada 6,5 días en esa comunidad.

El presidente del bloque de diputados del Partido Verde brasileño, Sarney Filho, manifestó su preocupación ante el riesgo de que ocurra un suicidio en masa de los indígenas de la comunidad Guaraní Kaiowá que el viernes realizaron una manifestación frente al Congreso en Brasilia.

Filho informó al ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, sobre la posibilidad de que los indígenas de esa colectividad, residentes en la estancia Cambará de Mato Grosso do Sul, se suiciden colectivamente, incluyendo a los niños.

Según datos del gobierno los suicidios se volvieron moneda corriente en esa comunidad, ya que en los últimos años se quitó la vida un indígena cada 6,5 días.

El diputado también transmitió su alarma al jefe del Supremo Tribunal Federal, Carlos Ayres Britto, quien se comprometió a tomar cartas en el asunto, luego de que la Justicia ordenó que los indígenas abandonen la hacienda Cambará, que ellos consideran tierras pertenecientes a sus ancestros.

Por otra parte, indígenas Guaraní Kaiowá repudiaron frente al Congreso brasileño la impunidad del asesinato del cacique de esa comunidad, al parecer perpetrado por sicarios, los llamados "jagunzos", a órdenes de un grupo de hacendados.

El grupo colocó 5 mil cruces en la principal avenida de Brasilia, la Explanada de los Ministerios, frente al Congreso, donde se informó que 503 indios fueron asesinados en Brasil entre 2003 y 2011, según datos del Consejo Indígena Misionero (Cimi), entidad vinculada a la Iglesia Católica.