Según cuenta este hombre, Dios se la habria otorgado a través de un sueño. La subasta comenzó con el precio de 89 centavos de dólar.

Un japonés puso en venta el planeta Tierra asegurando que Dios se la había otorgado en un sueño. El precio inicial estaba fijado en 89 centavos de dólar y a los pocos días que el aviso comenzó a circular por la Red, alcanzó los 123 millones de dólares.

El japonés clasifica a nuestro planeta como "auténtico" y advierte a los oferentes no hay devoluciones. De esa manera, quien haga la oferta ganadora, tendrá que hacerse cargo del planeta y sus habitantes.

Y es muy serio al respecto. Advierte a posibles bromistas que se abstengan de publicar ofertas falsas y en chiste, porque si no dará de baja al preciado objeto.