Wang Qishan
© Guang Niu/Getty ImagesWang Qishan, el nuevo Secretario de la Comisión Central de Inspección Disciplinaria del Partido Comunista Chino.
Lanzada con tanta fanfarria, la campaña contra la corrupción en China, que se dice se necesita urgentemente para salvar el Partido Comunista y al estado, puede después de todo resultar en una medida ineficaz.

Wang Qishan, el nuevo Secretario de la Comisión Central de Inspección Disciplinaria del Partido Comunista Chino convocó a ocho profesionales para una reunión especial el 30 de noviembre. Seis de los ocho expresaron la necesidad de un sistema donde los funcionarios del Partido revelen sus activos financieros, según un informe del 29 de diciembre del Observador Económico, un sitio web financiero con base en Shandong.

El profesor Jiang Mingan de la Universidad de Beijing, uno de los profesionales en la reunión, le dijo al Observador Económico que mientras Wang expresó su confianza en comenzar el proceso de revelación de bienes, también afirmó que habría algunas "dificultades".

Los internautas chinos se montaron a la causa contra la corrupción con gran entusiasmo ayudando a exponer casos de corrupción. Pero muchos cibernautas ahora dudan de la sinceridad del régimen chino en la lucha contra la corrupción.

Bloomberg citó un cibernauta diciendo sarcásticamente, "No habrá más dificultades una vez que las ocho familias grandes transfieran todo su dinero y propiedades".

Las "ocho familias grandes" son los descendientes de un grupo de elite de ex luchadores revolucionarios que condujeron a la apertura económica de China después de la muerte de Mao y amasaron enorme riqueza e influencia.

Wu Shuping, microblogger de Guangdong, comentó sobre el lento progreso de conseguir que funcionarios públicos declaren su riqueza comparada a la gran velocidad mostrada por el Congreso Nacional del Pueblo en aprobar el proyecto de ley que exige que los usuarios de Internet revelen su identidad.

Wu le dijo a sus 100 mil suscriptores: "la nueva ley de seguridad de Internet tomó sólo dos días para promulgarse - desde el 27 de diciembre, cuando se aprobó el proyecto, a la votación sobre el proyecto de ley el 28 de diciembre, en contraste, vamos 18 años y contando desde que se inició el debate para la divulgación de la riqueza de los funcionarios públicos. Y sin embargo no hay todavía ninguna resolución a la vista en el futuro previsible. Seguro, Internet no está exento de la ley, pero sí los políticos".

Anteriormente en 2012, Lei Chuang, un estudiante de posgrado de la Universidad de Shanghai Jiao Tong, envió una carta a 53 departamentos centrales del Partido pidiendo la divulgación de sus salarios, reportó el Observador Económico.

Aunque recibió respuestas de 40 departamentos, Lei esperaba que al menos un oficial de alto rango estuviera dispuesto a declarar sus ingresos, pero ninguno lo hizo, dice el artículo.

Lei predijo que hasta para los funcionarios públicos de clasificación más bajos se necesitarían 10 años para exponer sus sueldos, y 20 a 30 años antes de que los sueldos de todos los funcionarios se hicieran públicos.

El Youth Daily de China concurrió con la predicción de Lei, diciendo que "20 años no son lentos sino rápidos para un país tan gigantesco como China".