Imagen
© Desconocido
El Observatorio Vulcanológico de Manizales reportó hoy un incremento de la lluvia ácida y los sismos detectados en el interior del volcán Nevado del Ruiz. El más reciente de ellos fue registrado anoche, con una magnitud local de cuatro grados en la escala abierta de Richter, perceptible en los centrales departamentos de Tolima y Caldas, precisa el informe difundido aquí.

Según el parte oficial, esos fenómenos están asociados al fracturamiento de roca en el edificio volcánico, localizado al norte del cráter Arenas, a una profundad de 6,67 kilómetros, ante lo cual decidieron mantener vigente la señal de alerta amarilla III.

Los sismólogos recomendaron a las comunidades cercanas -ubicadas en áreas de influencia- continuar atentas a cualquier eventual cambio en la actividad del Nevado del Ruiz.

El nivel amarillo III es síntoma de inestabilidad y amerita especial atención, máxime cuando están surgiendo cambios adicionales, como las lluvias ácidas y la sucesión de seísmos mayores a 2, 5 grados ocurridos en los últimos días, señaló la directora del Observatorio, Patricia Cortez.

"Los sismos pueden tener migración al cráter y nos pueden dar información acerca de lo que pueda pasar con el volcán, por eso los estemos evaluando", añadió.

A esto se suma el incremento de altas columnas de vapor y azufre, conocidas como lluvia ácida, que han ocasionado daños en las cosechas y los techos de las viviendas ubicadas en las proximidades de la zona.

Los campesinos del poblado rural de Herveo, en el departamento de Tolima, manifestaron su preocupación por las consecuencias de una lluvia de esas carecterísticas, que suele provocar enfermedades en el ganado, como ocurre con las emisiones ceniza de los últimos días.

El secretario de Planeación de Casabianca, José Alirio Velosa, asegura que ya se han derrumbado techos y suscitado emergencias.

Desde el 5 de septiembre de 2012, la señal de alarma se mantiene en amarillo ante el aumento de sismicidad del volcán, y desde el 10 de abril son frecuentes las emisiones de ceniza, aunque de menor escala, puntualizó Cortez.

Conocido también como Mesa de Herveo en la etapa precolombina, el Nevado del Ruiz es el más septentrional de los volcanes del cinturón de los Andes.

Con una altitud de cinco mil 321 metros sobre el nivel del mar, su erupción del 14 de noviembre de 1985 se mantiene viva en la memoria colectiva de los colombianos. Fue el día en que la población de Armenia quedó borrada del mapa ante la avalancha sucesiva de lava lanzada por el volcán a una velocidad de 300 kilómetros por hora.