Comentario: Desde SOTT, pedimos a nuestros lectores que lean este enfoque SOTT con una mente abierta. Todos sabemos que nuestro Gobierno nos miente. Todos reconocemos que los medios de comunicación nos engañan. Sin embargo, muchas veces somos incapaces de aplicar este conocimiento cuando nos enfrentamos a una mentira difundida por nuestro Gobierno o por los medios de comunicación. Las mentiras sobre el tabaco son las más difíciles de aceptar. No se deje engañar de nuevo.


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Alrededor del año 1999, se me pidió analizar los datos de las mujeres embarazadas fumadoras para una importante compañía de seguros de salud. Habían puesto en marcha una campaña para que las mujeres embarazadas dejaran de fumar y esperaban encontrar interesantes datos para apoyar su caso.

Solía ​​dar cursos universitarios que cubrían este tema. Los libros de texto dicen que fumar causa bebés prematuros con bajo peso. Debido a que estos bebés de madres fumadoras tienen más probabilidades de tener defectos de nacimiento. En el caso del alcohol, dos bebidas al día se considera seguro, pero con el tabaco, no había umbral de seguridad. Pensé que esto era bastante extraño. ¿Usted fuma un cigarrillo durante el embarazo y entonces tiene más probabilidades de tener un bebe con defectos congénitos? Incluso para un fanático de la salud del núcleo duro, esto es difícil de creer.

Aquí está lo que se encontró en los datos. Los bebés de madres fumadoras su peso promedio fue de 3.232 gramos (7,1 libras). Los bebés de madres no fumadoras tuvieron un promedio de 3.398 gramos (7,5 libras). Esta es una diferencia de media libra y es estadísticamente significativa. Pesar siete libras al nacer se considera saludable, no provoca ninguna alarma. Los bebés son considerados con bajo peso si tienen menos de 2.270 gramos (5 libras). El 4,5% de los bebes de madres fumadoras tenían bajo peso y el 3,3% de los bebés de madres no fumadoras tenían bajo peso. Esta diferencia no es significativa. No hay ninguna indicación aquí, basada en el peso, de que fumar sea un riesgo para la salud.

El otro factor de riesgo es la duración del embarazado. Una gestación normal es de 253 días. El 4% de madres fumadoras no completaron el periodo promedio y el 7,8% de las madres no fumadoras tampoco. Las madres fumadoras obtuvieron mejores resultados que las madres no fumadoras, pero la diferencia no fue significativa. Obviamente no había riesgo de la reducción del periodo para las madres fumadoras.

Debido a que las madres no fumadoras tenían bebés más pesados, ​​uno esperaría más cesáreas para las madres no fumadoras. Había cerca de un 20% más. Esto es significativo en el nivel 0,05, pero no el nivel de 0,01; por lo que se podría argumentar la importancia de cualquier manera dependiendo de su parcialidad. Los datos aquí son limitados debido a que sólo el 5% de las mujeres embarazadas fumaba, pero la tendencia para las madres fumadoras era de menos bebés retenidos en el hospital, menos cesáreas, insignificantemente menos partos prematuros y un aumento no significativo de bebés con bajo peso clínico.

Estos datos pueden explicarse asumiendo que, cuando las mujeres embarazadas están estresadas​​, se automedican para aliviar el estrés. Las mujeres no fumadoras tienden a comer más, causando que el bebé sea más grande y le sea más difícil cumplir su cometido de salir de su madre. Esto también puede causar otros problemas. Las mujeres que fuman tienden a encenderse un cigarro cuando están bajo estrés. Esto es menos perjudicial para el bebé que comer en exceso. Por esta razón, las madres fumadoras tienden a tener mejores resultados para el bebé y para la madre. También cuestan menos a la compañía de seguros.

Usted podría estar interesado en saber que esta información no fue utilizada. Me dijeron que el negocio de los seguros médicos está muy regulado por el Gobierno. A la compañía no se le permitió decir la verdad acerca de estos resultados, a pesar de que era mejor para la compañía de seguros y para los pacientes.

No creo que estos resultados sugieran que las mujeres deben comenzar a fumar cuando se quedan embarazadas. Lo que creo que sí indican es que es una muy mala práctica tratar de que las madres fumadoras dejen de fumar cuando se quedan embarazadas.
Sobre mí

Tengo un doctorado en psicología experimental y he trabajado tanto en la investigación como en la docencia. Yo soy un fanático de la salud y no respaldo fumar ni me gusta estar cerca de las personas que fuman. Me quedé muy sorprendido por los resultados. Si tuviera prejuicios por supuesto estaría en contra de estos resultados.Sin embargo, creo que es horrible denegar la información a las personas e, intencionalmente, darles un mal consejo para avanzar en una agenda política.