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Los bomberos de los estados australianos de Nueva Gales del Sur y Victoria intentan sofocar hoy unos 100 focos de incendios, que ya devoraron 16 viviendas y cobraron la vida a una mujer.

En medio de la ola de calor que azota Australia con temperaturas superiores a los 40 grados Celsius, agentes, socorristas y voluntarios tratan de apagar las quemas registradas en Grampians, 300 kilómetros al oeste de Melbourne, con saldo de una mujer ahogada por el humo y más de 52 mil hectáreas de bosques consumidas.

De acuerdo con el reporte, 12 casas se quemaron durante los fuegos en las sureñas localidades de Flinders Ranges, Murraylands y Southern Barossa Valley.

Otros cuatro inmuebles se carbonizaron en la aledaña Victoria, en el incendio de Grampians, uno de los 34 activos en este estado del sureste de Australia.

Las autoridades meteorológicas esperan un cambio en las condiciones climatológicas y que bajen las temperaturas con el propósito de poder controlar los fuegos, algunos originados por rayos y otros de manera intencional.

El año pasado fue declarado el más caluroso en Australia, nación en la cual la temperatura media aumentó en 0,9 grados centígrados desde 1910.

La Comisión del Clima advirtió que las olas de calor en la nación oceánica serán más frecuentes, más fuertes y durarán más tiempo, y vinculó el fenómeno al cambio climático.