Google actualizó la versión en inglés de sus "Condiciones de servicio", donde reconoció de forma explícita que todos los correos electrónicos que entran y salen de Gmail son analizados por un software, con el objeto de crear anuncios personalizados.
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La revisión de los términos indica que el sistema de
Google escanea los contenidos de todos los mails, tanto los que están en tránisto como aquellos almacenados en los servidores de la compañía, una práctica que recientemente fue objeto de litigios.
"Nuestros sistemas automatizados analizan tu contenido (incluyendo a los correos electrónicos) para ofrecerte de forma personal características relevantes de productos, tales como resultados de búsqueda personalizados, publicidad a medida y detección de spam y malware. Este análisis se realiza en el momento en que el contenido se envía, se recibe y se almacena", indican los nuevos términos de las Condiciones de servicio.
Desde
Google Argentina explicaron que el escaneo se realiza sólo en los mails y en los resultados de búsqueda, y subrayaron que no incluye a los documentos almacenados en Google Drive.
También puntualizaron que no se trata de un cambio en las condiciones, sino que se agregó un párrafo con la intención de aclarar los términos.
"Nosotros queremos que nuestras políticas sean simples y fáciles de entender para nuestros usuarios. Estos cambios le darán a la gente aún más claridad y están basados en el feedback que hemos recibido en los últimos meses", explicó en diálogo con
Télam María Florencia Sabatini, gerenta de Comunicaciones y Asuntos Públicos de
Google.
El escaneo de los mensajes de
Gmail era un secreto a voces -así se explica la existencia de publicidad personalizada en el servicio de correo electrónico-, aunque desde la empresa esperaron hasta ayer para explicitarlo.
La actualización de las Condiciones del servicio llega casi un mes después de que una jueza del Estado de California desestimara una demanda colectiva por violación de la privacidad a cientos de millones de usuarios de
Gmail.
El grupo de usuarios del servicio de correo electrónico había acusado a
Google de violar las leyes federales y estatales de privacidad, justamente por escanear los mensajes personales.
Desde
Google respondieron que los usuarios implícitamente consentían esa actividad, reconociéndola como parte del proceso de envío y recepción de mails.
Este reciente proceso por el escaneo de los correos electrónicos no constituye la primera acusación de violación de privacidad contra
Google. De hecho, cuando en junio de 2013 se destapó el escándalo del espionaje masivo de la Agencia de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (NSA), una de las primeras filtraciones acusaba a la compañía -junto a
Facebook, Apple, Microsoft, Yahoo!, Skype, PalTalk, YouTube y AOL- de participar en el programa PRISM.
Según trascendió en base a documentos filtrados por el ex técnico de inteligencia Edward Snowden, la NSA tenía acceso directo a las comunicaciones online y a los servidores de aquellas empresas, con el consentimiento de estas.
"No participamos en ningún programa que permita al gobierno estadounidense ni a ningún otro acceso directo a nuestros servidores", contestó entonces el co-fundador de
Google Larry Page, en una entrada en su blog.
Por su parte, con más de 425 millones de usuarios en todo el mundo, disponible en 75 idiomas y 10 años de existencia,
Gmail es el principal servicio de correo electrónico a nivel global, además de ser una puerta de entrada a los distintos servicios de
Google.
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