MONTEVIDEO (Sputnik) — Partidos de izquierda y organizaciones sociales de Paraguay convocaron una marcha en Asunción para expresar su desconfianza en la justicia de su país tras la condena a prisión de once campesinos por la masacre de Curuguaty, ocurrida en 2012, señalaron a Sputnik Nóvosti familiares de tres de las víctimas de este hecho.

"Protestamos contra la corrupción del poder judicial. Hoy está pasando con 11 compañeros de Curuguaty, pero otro día le puede pasar a otra gente campesina, gente pobre. No confiamos en la justicia paraguaya porque solamente funciona para la gente adinerada", dijo a esta agencia Martina Paredes, hermana de dos de los campesinos muertos en 2012 en ese hecho.
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© REUTERS/ Jorge Adorno
En junio de 2012 en la ciudad de Curuguaty (noreste) 11 campesinos y seis policías murieron durante el desalojo de trabajadores rurales que ocupaban un territorio en protesta por la escasez de tierras para el cultivo.

El proceso judicial que concluyó el lunes, se centró únicamente en las muertes de los seis policías, mientras que el expediente por los 11 campesinos asesinados no ha avanzado y no hay ningún oficial de policía imputado por participar en estos hechos.

Los campesinos acusados fueron condenados a penas de entre cuatro y 30 años de prisión.


Comentario: La verdad que esto genera mucha frustración. Los campesinos ejercen su derecho legal y humano de protestar en contra de las políticas de su gobierno (teóricamente el gobierno es SUYO, pues ellos son el pueblo, es decir, les pertenece). El gobierno entra a forzarlos a que dejen lo único que tienen como argumento para la discusión y el dialogo. Es decir, no va a haber dialogo, al gobierno no le interesa el dialogo. Mientras son desalojados sin permitirles hablar, muchos de ellos son asesinados. Y además de este crimen, se les condena a 30 años de cárcel.


Paredes aseguró a esta agencia que los últimos cuatro años "no solo han sido duros para su familia, sino para Curuguaty entero, que quedó con miedo y muchas secuelas psicológicas" tras la masacre ocurrida en junio de 2012.

Dos hermanos de Paredes fallecieron durante esa ocupación de tierras, mientras que otro ha sido condenado a 20 años de cárcel por tentativa de homicidio, asociación criminal e invasión ajena.

A Luis Olmedo Paredes "lo condenaron porque encontraron su nombre en una lista que tenían los agentes en la ocupación", sostuvo su hermana, quien asegura que no existen pruebas contundentes en su contra.

"Solo se investigó la muerte de 6 policías y acá hay 17 muertos. Las viudas (de los policías) salieron a festejar (la condena) como una victoria, como cómplices del sistema anticampesino", añadió con indignación Paredes.

Otro de los familiares de los campesinos fallecidos en Curuguaty, Darío Acosta, quien perdió a su sobrino de 18 años, explicó a esta agencia que hace cuatro años recurrieron a la ocupación de las tierras porque las parcelas de 10 hectáreas que tienen "no son suficientes para el desarrollo de los pequeños productores".


Comentario: Cabe destacar esas tierras estaban establecidas como estatales y fueron realmente invadidas por un agro-ganadero con mucha influencia en el país. Vea: Paraguay: El juicio político de Curuguaty revela la profunda ineptitud del aparato judicial y nos afecta a todos


El problema no se pudo solucionar porque "no hay una voluntad política", señaló Acosta, quien aseguró que están "invadidos por los grandes sojeros brasileños".


Comentario: Y no olvidemos que la voluntad política de entonces también tenía planes para el gobierno mismo. Curuguaty fue el catalizador de lo que terminó siendo el golpe de estado en contra del presidente Lugo en 2012. Algo que cambio el panorama político no solo de Paraguay, sino de toda la región.


La investigación del caso Curuguaty ha estado llena de irregularidades, según denunciaron la defensa de los campesinos y organizaciones civiles, y motivó un juicio político contra el entonces presidente Fernando Lugo, que culminó con su destitución.

El martes, la oficina paraguaya de Amnistía Internacional emitió un comunicado rechazando la condena y exigió al Ministerio Público de ese país que investigara la muerte de los once campesinos.


La marcha del jueves, que comenzará a las 18:30 horas (20.30 GMT) desde el colegio Cristo Rey hasta el Palacio de Justicia de la ciudad de Asunción, fue convocada por el Congreso Democrático del Pueblo de Paraguay, agrupación que reúne a partidos de izquierda, organizaciones campesinas y gremios obreros.