Un mensaje en Telegram confirma que el 'califato' del Estado Islámico tiene seguidores en Brasil.
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Un grupo denominado Ansar al Khilafah Brazil (Tropas del Califato de Brasil) ha publicado en el servicio de mensajería Telegram amenazas indirectas a las fuerzas de orden de ese país latinoamericano a pocas semanas de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, según ha descubierto la empresa estadounidense SITE Intelligence Group durante una operación para controlar los contenidos extremistas que circulan por Internet.

El mensaje, publicado en caracteres árabes, hace una alusión a los preparativos en materia de seguridad para el mayor evento deportivo de este año. Sus autores, que han conocido a través de la prensa que la Policía de Brasil realiza entrenamientos conjuntos con sus colegas de Francia para mejorar la seguridad, consideran que ese esfuerzo resulta inútil:

Si la Policía francesa "no pudo impedir los atentados en Francia", su entrenamiento con la Policía brasileña "no servirá para nada", advierte este colectivo, que no solo alude a un posible ataque, sino que también proclama lealtad a Abu Bakr Al Baghdadi, el líder supremo del 'califato' de Oriente Medio, informa la cadena O Globo.

El peligro se cierne sobre Brasil

La directora de SITE IG, Rita Katz, ha admitido que se trata de la primera vez que un grupo de América del Sur ha declarado su apoyo al Estado Islámico. Esta especialista en la materia también ha destacado que la declaración ha aparecido poco después de que se conociera que el grupo Nashir, que proporciona todo tipo de información sobre el movimiento extremista —también por medio de Telegram—, comenzó a difundir informaciones de adoctrinamiento extremista en portugués.

El peligro se cierne sobre Brasil desde hace meses. Ya en noviembre, un terrorista de origen francés advirtió que ese país sudamericano "sería el próximo objetivo", según confirmó el director del Departamento de Lucha contra el Terrorismo de la Agencia Brasileña de Inteligencia (Abin), Luiz Alberto Sallaberry. Además, las autoridades constatan que ha aumentado el número de brasileños que comparten la ideología del EI.

Para prevenir posibles ataques durante el evento olímpico, Brasil está reforzando de manera gradual las medidas de seguridad en los aeropuertos y el sistema de acceso a las instalaciones deportivas. Asimismo, a raíz de las alertas de las agencias de inteligencia de otros países, el comité organizador ha denegado o revocado credenciales a 40 personas.