Bueno, para ser precisos los debes tú, los debo yo, los debe él y ella también. Todos y cada uno de los habitantes de este país, desde los bebés hasta los ancianos, debemos 24.000 euros de vellón que deberemos pagar y pagaremos. Pero parece que no es el tema de debate favorito para los políticos de toda tendencia. Y eso que como diría Mariano R., el mítico creador de citas absurdas [con interpretación libre]: "La deuda de los ciudadanos no es cosa menor. Dicho de otra forma: es cosa mayor". La cerámica de Talavera, ya tal.

españa
© GoogleSí, sí, tú.


Pues sí, don Mariano, es cosa mayor. El haber llevado desde 2007 la deuda pública de España de un 35% a un 69% con el PSOE y de ese 69% al 101% del PIB con el PP, no es cosa menor, es cosa de guillotina grande y vieja. Como mínimo habría que pasar por ella a la documentación económica del programa de gobierno del PP (y la del último PSOE), para que nadie tenga la tentación de repetir esas recetas. Porque, especialmente con los de Génova 13 del Percebe, hay que tener narices para haber soportado la peor legislatura de recortes educativos, sanitarios, de prestaciones, asistencia y derechos de toda índole, y encima, tras tanto recorte salvaje, haber vivido a base de préstamos.
Unos préstamos que han servido para engordar balances (nada de rescatar, eso es mentira) de bancos y grandes empresas mientras, por ejemplo, se seguía desahuciando a gente 'culpable' de no tener trabajo ni una mínima prestación o ayuda con la que hacer frente a sus pagos y necesidades (y no necesariamente por este orden).
El caso es que se debe todo ese dinero, y por muy odiosa o ilegítima que sea esa deuda, con estos mimbres electorales (y quizá con el resto de los disponibles también) la acabaremos pagando. Y es importante matizar que, por muy mala costumbre que haya al respecto, en realidad para hacernos una buena idea de lo que significa ese nivel de deuda, no cabe medirla en porcentaje respecto al PIB, sino en relación al presupuesto del Estado. Principalmente porque lo del PIB es un indicador que a los de a pie, entre otras razones, con el actual modelo económico basado en la especulación financiera y no en la producción, debería importarnos tres pimientos (por no decir otra cosa). Y porque si lo hacemos así, que es como sí nos interesa, veremos que dentro de poco deberemos el equivalente al presupuesto completo del país durante cuatro años.
¿Alguien nos explica de dónde más van a recortar sin convertirnos en el Cuarto Mundo para no seguir incrementando una deuda que hoy ya parece impagable?
Es una pregunta trampa, porque evidentemente sí nos pueden convertir en el Cuarto Mundo, porque cada día parece más probable que vayamos a ser los primeros en 'disfrutar' de los derechos y servicios de África central pagando los mismos impuestos que los países nórdicos, pero solo por abajo; solo los de abajo, porque hasta en eso vamos a ser originales. A nuestros ricos no hay que molestarlos, porque si lo hacemos se van, como ya se fueron hace mucho tiempo su dinero y sus obligaciones.

Vuelvo a repetir, porque parece que hay quien no lo tiene claro: la pagaremos. Esa deuda es nuestra; se adquiere, no sin cierto orgullo institucional y mediático - "El tesoro ha 'conseguido' colocar xmil millones de deuda en los mercados" - , en nuestro nombre por parte de nuestros representantes políticos electos. Y, de momento, ya vamos a un Mercedes por persona. Razón tenían cuando decían que estábamos viviendo por encima de nuestras posibilidades. Si es que somos unos derrochadores, unos manirrotos. Por ejemplo mis vecinos, votantes del PP, los dos en el paro, con tres niñas y el abuelo, y están pagando seis de estos. Y luego dicen que no tienen ni para comer, y que la culpa es de los comunistas o de los inmigrantes, que lo ha dicho Jiménez Losantos.

Como el PP siga robando, a poco que sepa presumir de ello con gallardía, ya veo próxima su mayoría absoluta, y en un plazo no muy largo de tiempo, sabiendo que desde el Deutsche Bank ya están pidiendo otro crash bursátil, en lugar de Mercedes, van a ser Rolls-Royce para todos, hasta para mis vecinos, o para la gente del poblado chabolista que empieza a dos manzanas de aquí. Seis Rolls-Royce. O aviones privados... porque cuando nos ponemos a despilfarrar no tenemos límite. ¡Viva el vino! Fin de la cita.

Deuda
© GoogleSí, sí, la pagaremos pero... ni podremos tocarla. Será para ellos.