Comentario: Mientras esta noticia era editada para su publicación, EE.UU. inició ataques contra los hutíes en Yemen, como era de esperarse.
ASHINGTON (Sputnik) — EEUU se reserva el derecho de dar una respuesta apropiada a los ataques contra sus buques de guerra frente a las costas de Yemen, advirtió el portavoz del Pentágono, Peter Cook.
© AP Photo/ Jacquelyn Martin
Comentario: Una pregunta retórica; ¿podría esto significar que hasta ahora la presencia de un buque de guerra norteamericano en aguas aledañas a Yemen era algo "no apropiado"?. Es decir, hoy pueden justificar su presencia en Yemen, pero ayer no podían.
Estas declaraciones se producen después de que un destructor de la Armada estadounidense fuera atacado con cohetes frente a las costas yemeníes por segunda vez en los últimos días.
Las informaciones sobre el primer ataque contra un destructor de la Armada estadounidense frente a Yemen trascendieron el lunes. Los insurgentes hutíes negaron entonces su implicación en el ataque.
Según el Pentágono, el buque atacado es el USS Mason que se encontraba en las aguas internacionales del mar Rojo.
"El buque empleó contramedidas defensivas, y el cohete no lo alcanzó. El USS Mason continuó sus operaciones", señala la nota.
Los enfrentamientos entre los rebeldes hutíes del movimiento chií Ansar Alá y las fuerzas del Gobierno continúan en Yemen desde 2014.
Una coalición liderada por Arabia Saudí apoya al Ejército gubernamental con acciones por tierra y aire. EEUU, que no interviene formalmente en el conflicto, suministra a los militares saudíes armamento y municiones por valor de miles de millones de dólares.
Comentario: Y de esta manera, se empieza a alejar la atención sobre los bombardeos de civiles en Yemen con armas estadounidenses por pate de la coalición Arabe; algo que incluso obligó a Obama y a Kerry a "revisar el apoyo a Riad". También se empieza a afianzar la idea de que los hutíes son salvajes que atacarían a cualquiera sin motivo y, por ende, merecen ser atacados, incluso cuando se encuentran en medio de una ceremonia.
Luego de que los hutíes hubiesen negado su implicación (lo cual es el detalle más interesante de este evento), es fácil establecer a quién beneficia el bombardeo poco exitoso de un buque de guerra estadounidense; y la respuesta es definitivamente que no beneficia a los hutíes, ni a su causa; pero sí a Estados Unidos, para justificar su presencia en la región.