Ni los belgas ni sus socios estadounidenses reconocen el hecho comprobado de que los aviones belgas F-16 bombardearon casas civiles en Siria. "Están demasiado ocupados inventando sus propios cuentos sobre las Fuerzas Aeroespaciales rusas", opinó Svetlana Kalmýkova, columnista de RIA Nóvosti.

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© Wikipedia/ U.S. Air Force
Moscú instó a Washington a reaccionar a los bombardeos de Hassadjek. Durante el ataque contra un pequeño pueblo cerca de Alepo fueron destruidas dos casas, seis personas murieron y cuatro resultaron heridas. De acuerdo con el Centro ruso de la Reconciliación en Siria, en la operación participaron los cazas belgas F-16 de la coalición liderada por EEUU.

La portavoz oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, afirmó que Rusia tiene información que confirma el ataque aéreo realizado por la fuerza aérea belga. Asimismo, instó al Departamento de Estado, Bruselas y todas las instituciones internacionales a condenar la muerte de civiles.

El primero en responder fue el Ministerio de Defensa de Bélgica, que inmediatamente negó su participación en el suceso.

"Se sabe muy bien cómo EEUU y sus aliados verifican los objetivos", destacó la autora del artículo.

Kalmýkova recuerda que el 17 de septiembre, los aviones de la coalición internacional atacaron las posiciones del Ejército sirio en la ciudad de Deir Ezzor. Decenas de soldados sirios que estuvieron luchando contra el grupo terrorista Daesh, fueron asesinados. Sin embargo, los terroristas pasaron a la ofensiva.
"El Departamento de Estado admitió más tarde que había sido un error. Aunque, según los militares estadounidenses, la operación se estuvo preparando durante varios días".
Otro episodio característico ocurrió recientemente en Yemen. El 8 de octubre la coalición árabe encabezada por Arabia Saudí bombardeó una procesión funeraria en Saná. Según la ONU, 140 personas murieron y más de 500 resultaron heridos. Al principio Riad también negó su participación.

Sin embargo, la investigación la confirmó. Como resultado, responsabilizaron al piloto y a los datos no precisos de la inteligencia.
"Resulta que los ataques contra los civiles o los soldados que luchan contra los terroristas, realizados por EEUU y sus aliados son un error perdonable. No obstante, las acciones de los aviones las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia y Siria son crímenes imperdonables que agravan la desastrosa situación humanitaria. Y eso que todas las acusaciones contra Moscú y Damasco son infundadas", explicó Kalmýkova.
Mientras tanto, las acusaciones de Rusia contra Bélgica no carecen de fundamento, aseguró Serguéi Zhelezniak, miembro del Comité de Asuntos Internacionales de la Duma —Cámara Baja del Parlamento de Rusia—.
"A diferencia de nuestros oponentes occidentales, siempre ofrecemos datos exclusivamente verificados, confirmados por documentos y registros de las cámaras. Creo que Bruselas debe disculparse ante el Ministerio de Defensa de Rusia por las desvergonzadas mentiras y acusaciones", declaró.
Zhelezniak indicó que el Ministerio de Defensa de Rusia proporcionó datos registrados por los medios técnicos especiales, que confirman que las aeronaves que atacaron a los civiles en Siria, pertenecen a la Aviación de Bélgica.
"Pero esta verdad no es conveniente para Bruselas, no encaja con el concepto de culpar a Rusia por la muerte de civiles sirios", añadió el diputado.
"Nuestro departamento militar dispone de todos los medios necesarios para realizar las misiones de inteligencia y seguimiento técnico, así que resulta muy divertido oír declaraciones de los europeos sobre datos poco fiables", concluyó.