Susto mayúsculo en Alemania. Durante la noche de este jueves, alrededor de las 20:50 horas, un hombre armado con un "arma punzante o cortante" han herido a hasta siete personas en la estación central de trenes de la ciudad de Düsseldorf, en el estado de Renania del Norte-Westfalia, al oeste del país.
Equipos de emergencia en las inmediaciones de la estación de Dusseldorf,
Equipos de emergencia en las inmediaciones de la estación de Dusseldorf.
La policía ha detenido al presunto autor del ataque, de 36 años de edad y con orígenes en la antigua Yugoslavia, después de que éste resultase herido al tratar de huir. Las autoridades también han añadido que el hombre, residente en la ciudad alemana de Wuppertal, presenta "obviamente problemas mentales".

Según ha informado el 'Spiegel', tras la agresión el hombre se ha dado a la fuga huyendo por los raíles de la estación, ha saltado varios metros desde un puente hacia la carretera y posteriormente ha sido capturado. La agencia AFP, citando a fuentes de la policía federal, ha informado anteriormente de que habría dos sospechosos. A pesar de que las primeras imágenes muestran el rastro de sangre en la estación, la policía ha apuntado que la vida de ninguno de las víctimas corre peligro aunque tres personas han resultado gravemente heridas y una de ellas tendría 13 años.

Fuerte despliegue policial

El portavoz de la policía local ha explicado que las fuerzas de seguridad han desplegado una operación a gran escala con agentes especiales fuertemente armados e incluos un helicóptero. Poco después del ataque y de las detenciones el recinto de la estación ha sido acordonado por los agentes y se ha bloqueado el servicio de los trenes. Durante los primeros momentos de confusión se había informado de que la arma utilizada habría sido un hacha y de que había dos detenidos, algo que ha descartado más tarde la policía.

Una vez más, como suele ocurrir en estos casos en Alemania, las autoridades han pedido calma a la ciudadanía y que se eviten las especulaciones sobre cosas que aún no han trascendido mientras se lleva a cabo la investigación, aún abierta en busca de esclarecer más detalles de los hechos.

Alemania en alerta

Por enésima vez en el último año y medio, Alemania ha vuelto a contener el aliento. Tras el atentado yihadista del pasado diciembre que causó 12 muertos y 48 heridos en Berlín, las autoridades han reforzado la alerta y las medidas de seguridad en todo el país. A pesar de que después de cada ataque se especula siempre con que se trate de un atentado perpetrado por el grupo terrorista autoproclamado Estado Islámico, este caso recuerda más al del tiroteo en Múnich del pasado 22 de julio que dejó nueve víctimas mortales, en el que el autor era un joven obsesionado por la violencia que sufrió un brote psicótico de tendencia homicida, lo que se conoce como Amok.