El presidente de Estados Unidos ha realizado estas declaraciones en el marco de la cumbre de la OTAN que se celebra en Bruselas.
Trump
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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha instado a la OTAN durante su discurso en la cumbre de este organismo a centrarse en el terrorismo, la migración y la "amenaza rusa". El líder estadounidense llegó este 24 de mayo a Bruselas para participar este jueves en esta reunión de los jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza Atlántica.

"La OTAN en el futuro debería centrarse en cuestiones de terrorismo y migración, así como en las amenazas de Rusia y en sus fronteras oriental y meridionales", ha remarcado el jefe de Estado estadounidense durante la presentación de un monumento cedido por EE.UU. en homenaje a las víctimas de los atentados terroristas del 11-S y al artículo 5 del Tratado de Washington, que se basa en la defensa mutua de sus miembros en caso de ataque exterior.

Además, el inquilino de la Casa Blanca ha declarado que una inversión del 2% del PIB en defensa en los países miembros de la Alianza es insuficiente para garantizar la seguridad. El presidente ha instado a sus aliados en el bloque militar a "cumplir con sus obligaciones financieras" para asegurar la defensa común ante las "muy reales y feroces amenazas actuales". Trump ha recalcado que "23 de los 28 países miembros todavía no pagan lo que deberían pagar" y que "muchas de estas naciones deben cantidades masivas del dinero que no han estado pagando en los últimos años".

Filtraciones sobre el ataque terrorista de Mánchester


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El momento político del ataque terrorista de Manchester es sospechoso


Trump también ha criticado a las agencias de Inteligencia de su país por las filtraciones de información sobre el ataque terrorista de Mánchester a los medios de comunicación que se han producido y prometió enjuiciar a los culpables.

Anteriormente esta semana, se reportó que los servicios de Inteligencia británicos habían decicido dejar de compartir datos sobre el atentado con sus homólogos estadounidenses después de que se produjeran diversas filtraciones de información clasificada a la prensa del país norteamericano.

Rusia y Turquía, los retos

La reunión de Bruselas se produce en medio del escándalo de las acusaciones al equipo de Trump de que supuestamente intercambió datos secretos con Rusia. Dado que varios miembros de la OTAN, entre ellos Polonia y los países bálticos, consideran a Moscú una gran amenaza para su seguridad nacional, el incidente aparentemente no hace aumentar su confianza en Washington.

Otro problema para la alianza es la situación actual de las relaciones con Turquía. Ankara ha estado tomando una línea cada vez más conflictiva con otras naciones de la OTAN. Los europeos están preocupados por la consolidación del poder del presidente Recep Tayyip Erdogan y desde Ankara hay malestar con Washington ya que su aliado norteamericano suministra armas a los combatientes kurdos - a los que Turquía considera terroristas - en Siria. Además, últimamente la OTAN se ha visto obligada a cambiar sus reglas sobre las relaciones de asociación con países no miembros porque Turquía bloqueó la cooperación con Austria.

A pesar de los obstáculos, los funcionarios de la OTAN esperan que el encuentro transcurra en un ambiente cordial, sobre todo porque es la primera reunión después de que los integrantes de la alianza ratificaran a Montenegro como 29.º Estado miembro del bloque. En Moscú se lamentó la decisión del país balcánico afirmando que sus dirigentes "no escucharon la voz de la razón y de la conciencia".