Las intenciones de Catar de iniciar un diálogo con Irán podrían haber provocado una campaña mediática agresiva en su contra, creen algunos expertos.

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© ReutersHamad bin Jalifa Al Thani, exemir de Catar
Este 25 de mayo, el canal saudita Al Arabiya publicó un artículo en el que acusó a las autoridades de Catar de apoyar el terrorismo citando datos que supuestamente contenían los documentos incautados por las fuerzas especiales de EE.UU. durante la operación contra Osama bin Laden en marzo de 2011.

La publicación revela pruebas de la cooperación de Catar con terroristas, en particular la financiación de organizaciones terroristas por parte de ciudadanos cataríes. Además, según el canal, Bin Laden en su momento escribió a una de sus esposas que buscara refugio en ese país, mientras que Khalid Sheikh Mohammed, uno de los organizadores de los ataques del 11-S, también se refugiaba en territorio catarí.

Intento saudita de "manchar" a Catar

La investigadora principal del Centro de Estudios Árabes e Islámicos de la Academia Rusa de Ciencias, Irina Zviáguilskaya, cree que el artículo de Al Arabiya representa un intento de Arabia Saudita de "manchar" a Catar. "Sabemos muy bien que no solo Catar lo hizo, y en el sentido táctico [todos las monarquías sunitas del golfo pérsico] apoyaron a los terroristas", señala la experta.


Comentario: Este es precisamente el punto; todas las monarquías de Medio Oriente apoyan de manera activa a los grupos que hoy se conocen como terroristas. Y ésta es su carta de preferencia cuando necesitan ganar una discusión política.


Las acusaciones de que Catar colaboró con Bin Laden tienen lugar en medio de lo que parece ser el inicio de una guerra mediática en el golfo. El catalizador de la misma fue la publicación por la agencia de noticias de Catar de una nota falsa que citaba a las máximas autoridades del país criticando a Donald Trump y elogiando a la organización libanesa Hezbolá y al grupo palestino Hamás.

El Gobierno de Doha confirmó que las declaraciones atribuidas al jeque Tamim bin Hamad Al Thani, emir de Catar, eran falsas, pero "las filtraciones, fueran intencionadas o no, tuvieron cierto impacto en todos los que se encontraban en Riad" durante la visita de Trump, cree Veniamín Popov, director del Centro de Asociación de Civilizaciones del Instituto de Estudios Internacionales de la universidad rusa MGIMO.

Popov cree que es posible que realmente el emir hiciera las polémicas declaraciones. "Cuando se hacen filtraciones de este tipo, después se pueden desmentir. Pero es un tipo de acción que se han convertido en un fenómeno bastante generalizado en la actual guerra de la información", explicó el experto a RT.

Guerra de palabras

Según el portal 'The Peninsula Qatar', el canciller catarí, Mohammed bin Abdulrahman al Thani, respondió a la amplia difusión de la noticia falsa por parte de los medios sauditas: "Obviamente, existe una campaña mediática dirigida contra Catar".
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© Jonathan Ernst / Reuters
Por su parte, Zviaguilskaya sostiene que el acicate para este conflicto entre los dos países del golfo pérsico fue la visita de Donald Trump a Oriente Medio. Según palabras de la académica rusa, al contar con el apoyo de Washington Arabia Saudita se sintió como el líder del mundo árabe y quería demostrarle ese liderazgo a Catar.

El factor iraní

La historia de la noticia falsa parece reflejar la verdadera confrontación entre Arabia Saudita y Catar. No es ningún secreto que Catar apoya al movimiento Hermanos Musulmanes, mientras que Arabia Saudita, Baréin y los Emiratos Árabes Unidos lo consideran una agrupación enemiga. En 2014, los tres países ya retiraron a sus embajadores de Doha para protestar contra su apoyo al movimiento.

Actualmente Catar también es acusado de respaldar a Irán. En 2015, el emir catarí llamó a mejorar las relaciones con la República Islámica. Además, antes de la visita de Trump a Arabia Saudita, donde el líder estadounidense instó a aislar a Irán, el canciller catarí, en una entrevista con Arab News, pidió mejorar las relaciones con Teherán. "Creemos que debemos tener relaciones positivas, basadas en la buena vecindad y la no interferencia en los asuntos de los demás", dijo el ministro.

Es posible que precisamente las intenciones cataríes para iniciar un diálogo con Irán hayan provocado una campaña mediática agresiva contra este país. Además, esta estrategia puede encontrar apoyo en países como Kuwait y Omán, que "tienen una política exterior menos dependiente de Riad", afirmó el analista político Hassan Hanizadeh. El experto Popov, a su vez, opina que la creciente confrontación está lejos de concluir.