MOSCÚ (Sputnik) - Corea del Norte condenó el ejercicio militar conjunto que Seúl y Washington planean celebrar a finales de este mes al afirmar que "echa leña al fuego".

desfile militar corea del norte
© AP Photo/ Wong Maye-E
El periódico del Partido de los Trabajadores de Corea, Rodong Sinmun, calificó el entrenamiento como "la expresión más explícita de la hostilidad" hacia el Norte, y señaló que "nadie puede garantizar que el ejercicio no derivará en un enfrentamiento real".

"EEUU se equivoca como nunca si se deja llevar por la idea de que una guerra en la península de Corea estaría a la puerta de alguien muy lejos, al otro lado del Pacífico", reseña la agencia surcoreana Yonhap el editorial publicado por este diario.

Corea del Sur y EEUU planean celebrar el ejercicio conjunto Ulchi Freedom Guardian del 21 al 31 de agosto.

A mediados de este mes, Corea del Norte amenazó con disparar sus misiles hacia la isla estadounidense de Guam, aunque el líder norcoreano, Kim Jong-un, dio a entender más tarde que el plan de ataque se pospone a la espera de que EEUU dé pasos hacia la distensión en la península de Corea.

El presidente de EEUU, Donald Trump, quien en un principio amagó con "fuego y furia" a Pyongyang y advirtió que las opciones militares ya están preparadas, calificó de sabia la decisión del dirigente norcoreano.

En lo que va de año, Corea del Norte llevó a cabo 11 pruebas de proyectiles balísticos, incluyendo el lanzamiento de dos supuestos misiles intercontinentales capaces de alcanzar el territorio de EEUU.

En 2016, Pyongyang realizó más de 20 ensayos de misiles balísticos, además de la cuarta y la quinta pruebas nucleares, pese a las prohibiciones del Consejo de Seguridad de la ONU.

A principios de julio pasado, Moscú y Pekín se pronunciaron por declarar una moratoria simultánea sobre el programa norcoreano de misiles y armas nucleares y los ejercicios conjuntos a gran escala de EEUU y Corea del Sur, así como por avanzar hacia la desnuclearización de la península de Corea.

El Departamento de Estado declaró a mediados de este agosto que EEUU no piensa renunciar a los ejercicios aliados en la península de Corea, reafirmando así el rechazo de Washington y Seúl a un planteamiento que fue formulado originalmente por Pekín y que se plasmó luego en una iniciativa chino-rusa.

Por su parte, Pyongyang evitó responder a la propuesta de Moscú y Pekín.