Republicanos del Senado de EE.UU. exigen al candidato del partido a la Cámara, Roy Moore, que retire su candidatura tras ser acusado por 5 mujeres de acoso sexual.
El líder de los republicanos en el Senado de EE.UU., Mitch McConnell, en una rueda de prensa en el Capitolio, en Washington D.C, 1 de agosto de 2017.
El líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, instó al candidato de su partido al Senado por el estado de Alabama (sur), Roy Moore, a abandonar la carrera electoral, después de que cinco mujeres lo acusaran de acoso sexual.
De hecho, un grupo de senadores republicanos ya había insistido en que Moore debía retirarse de los comicios, dadas las acusaciones que pesan sobre él, según informó el lunes la cadena estadounidense
CNN.
El senador Cory Gardner, que preside la Comisión Nacional Republicana de Senadores, llega más allá al decir que si Moore "se niega a retirarse y gana, el Senado debería votar a favor de expulsarlo" de la referida Cámara Alta. Gardner argumenta que el candidato no encaja con los requisitos éticos y morales del Senado estadounidense.
Si Moore no presentara la renuncia exigida y los republicanos forzaran su expulsión, se trataría de la decimosexta expulsión en la historia del Senado estadounidense.
La semana pasada, el diario local
The Washington Post publicó una serie de informaciones donde revelaba que Moore trató de mantener relaciones sexuales con una menor cuando tenía unos 30 años.
Pocos días después, una residente de Alabama acusó al candidato republicano de haberla acosado sexualmente cuando era menor de edad. Desde entonces, otras cuatro mujeres han acusado al exjuez del circuito de tribunales del mismo estado (1992-2000) de haberlas acosado sexualmente.
La última de las denuncias se produjo ayer lunes. En una rueda de prensa en Nueva York, la empresaria Beverly Young Nelson acusó a Moore de haberla acosado sexualmente en 1978, cuando era una mesera de 16 años y él, entonces con el doble de edad, se desempeñaba como fiscal del distrito (1977-1982).
La lista de altos cargos políticos estadounidenses acusados de cometer acoso, agresiones o abusos sexuales es muy larga. Como ejemplo se puede señalar al actual presidente de EE.UU.,
Donald Trump, los expresidentes
George Bush (1989-1993) y Bill Clinton (1993 -2001) y el
juez del Tribunal Supremo Clarence Thomas.
Comentario: Parece que toda la porquería escondida de la patocracia se ve expuesta poco a poco, pero no se engañe: esto solo es la punta del iceberg... Sin embargo, en este caso en particular, no podemos dejar de considerar la posibilidad de que los demócratas estén usando este reciente "destape" de depredadores para desprestigiar a Roy Moore y al partido republicano, algo que tiene sentido ante el entorno político tan polarizado en EEUU desde la derrota de la preferida del Estado Profundo: Hillary Clinton. Así que todo esto podría estar politizado.
Hasta ahora
no hay evidencias concretas que respalden las acusaciones, y Moore no se ha retirado del ojo público como ha pasado en casos similares con verdaderos culpables. Por el contrario, el senador mantiene su postura y la ha hecho pública varias veces. La esposa del senador, Kayla Moore,
afirmó ante los medios que todo esto es un complot creado por sus críticos, y que las supuestas afectadas son actrices pagadas.
Lo curioso e irónico es que la gran mayoría de casos de abuso
se han presentado dentro del círculo demócrata. Recordemos uno de los casos más sonados, donde se relacionóa Weinstein y sus trastornos sexuales con los Clinton... y de paso, los Clinton y el
Pizzagate, etc.. Por supuesto, no podemos olvidar la larga lista de acosos y abusos del buen Bill... 'dime con quién te juntas y te diré quién eres'.
En términos generales, la patocracia siempre esconde su naturaleza enferma y depredadora muy bien. No es sino hasta que ésta se vuelve evidente en uno de los suyos que lo abandonan y fingen estar sorprendidos... mera pantomima para mantener la máscara de la cordura de los que quedan.
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Hasta ahora no hay evidencias concretas que respalden las acusaciones, y Moore no se ha retirado del ojo público como ha pasado en casos similares con verdaderos culpables. Por el contrario, el senador mantiene su postura y la ha hecho pública varias veces. La esposa del senador, Kayla Moore, afirmó ante los medios que todo esto es un complot creado por sus críticos, y que las supuestas afectadas son actrices pagadas.
Lo curioso e irónico es que la gran mayoría de casos de abuso se han presentado dentro del círculo demócrata. Recordemos uno de los casos más sonados, donde se relacionóa Weinstein y sus trastornos sexuales con los Clinton... y de paso, los Clinton y el Pizzagate, etc.. Por supuesto, no podemos olvidar la larga lista de acosos y abusos del buen Bill... 'dime con quién te juntas y te diré quién eres'.
En términos generales, la patocracia siempre esconde su naturaleza enferma y depredadora muy bien. No es sino hasta que ésta se vuelve evidente en uno de los suyos que lo abandonan y fingen estar sorprendidos... mera pantomima para mantener la máscara de la cordura de los que quedan.