Los estadounidenses barajaron realizar un ataque de bandera falsa para tener argumentos que les permitieran atacar a la Unión Soviética.
robert kennedy
En los años 60, Estados Unidos consideró fabricar u obtener aviones soviéticos con el fin de encontrar motivos para comenzar una guerra contra la URSS, según revelan documentos desclasificados este octubre sobre el asesinato del que fue presidente de EE.UU., John F. Kennedy, informa el portal norteamericano Daily Caller.

Estos informes reflejan que el fiscal general de EE,UU, Robert Kennedy, planteó esa "posibilidad" el 22 de marzo de 1962, durante una reunión del denominado Grupo especial.

Una enciclopedia de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) indica que formaban parte de este colectivo el director de esa organización, John McCone; el asesor de Seguridad Nacional McGeorge Bundy; el jefe del Estado Mayor Conjunto, Lyman Lemnitzer; y ese procurador general. Además, el propio JFK y el secretario de Estado, Dean Rusk, participaban en algunas reuniones, aunque no eran miembros.

Los motivos para tomar esa medida serían tres: emplear esas aeronaves "en una operación para engañar a aviones enemigos en el aire", lanzar "un ataque sorpresa contra instalaciones enemigas" o "provocar" a los pilotos soviéticos para que atacaran "instalaciones estadounidenses o amigas" y, así, "ofrecer una excusa para una intervención de EE.UU.".

Esta idea de emplear aseronaves en supuestos ataques de 'bandera falsa' se reveló por primera vez en el libro 'Una vida inacabada: John F. Kennedy, 1917-1963', publicado por el historiador Robert Dallek en 2001, aunque el autor escribió que fue una sugerencia de John McCone, no de Robert Kennedy.