© Wilson Pinto
Los monitoreos dan cuenta que la actividad actual del Tungurahua se manifiesta por emisiones de gases y contenidos de ceniza de alto a moderado, con alturas de entre 3 a 4 kilómetros sobre el nivel del cráter, con la consecuente caída de ceniza en cantones y poblaciones cercanas al volcán.
También se ha detectado el ensanchamiento del cono volcánico, lo cual evidencia el ascenso de magma hacia la superficie. Otro parámetro es el incremento de gases volcánicos con valores superiores a las mil toneladas por día.
Hugo Yepes, director del Instituto Geofísico, explicó que esto es una señal de que internamente hay una deformación del flanco del volcán. "Es una de las más grandes de los últimos once años. Esto pone en evidencia del magma (lava) que va saliendo a la superficie", mencionó.
Agregó que la situación podría durar días y que tiene similitud con lo acontecido en agosto del 2001, donde la ceniza tuvo tanto peso que rompió las ramas de los árboles. No se descarta que se generen flujos piroclásticos que pueden afectar cultivos y a la población.
María del Pilar Cornejo, secretaria nacional de Gestión de Riesgos, indicó que se ha evacuado a unas 230 familias. Ochenta de Cusúa, 30 de Bilbao (más 100 de manera itinerante) y 30 más de Chacauco. La población se mantendrá en albergues dependiendo de la situación del volcán.
Mientras que el Ministerio de Educación suspendió por 48 horas las clases en todos los establecimientos educativos que funcionan en la parroquia Bilbao (Chimborazo) y en las parroquias Cusúa y Chacauco (Tungurahua).
Desde las 12:45 de ayer se registra un incremento mayor de actividad volcánica con emisiones de ceniza en una columna de 8 km de altura. En momentos esta llegó a los 12 km lo que afecta la navegación aérea. Los vientos están entre noroeste y sureste, lo cual podría afectar potencialmente los aeropuertos de Manta, Esmeraldas y a las aerovías de Guayaquil y Salinas. La Dirección de Aviación Civil anunció que modificó la ruta Quito-Cuenca por la Amazonía.
A partir del mediodía de ayer en que el volcán arrojó columnas de ceniza de 8 km de altura se cambió el nivel de alerta de moderado a moderado-alto, informó Patricio Ramón, técnico del Instituto Geofísico (IG) que estaba de turno en la estación de monitoreo de Guadalupe, en la provincia de Tungurahua. Más tarde se declaró la alerta naranja.
Ramón indicó que la ceniza se dirigió hacia el occidente y noroccidente y que hubo reportes de caída en los cantones tungurahuenses de Mocha, Tisaleo, Cevallos y Ambato (en cantidades mínimas); además, en las ciudades de Guano, Penipe y Riobamba (Chimborazo). Los dos primeros cantones se declararon en sesión permanente. En Guano se instruirá a los habitantes sobre qué hacer en caso de una emergencia.
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