No había armas químicas en ninguno de los tres objetivos atacados en territorio sirio el 14 de abril por EE.UU., Reino Unido y Francia, ha afirmado el representante del Estado mayor ruso.
Un técnico de laboratorio realiza una prueba en la sede de la OPAQ en La Haya, Países Bajos, el 20 de abril de 2017.
© JOHN THYS / AFPUn técnico de laboratorio realiza una prueba en la sede de la OPAQ en La Haya, Países Bajos, el 20 de abril de 2017.
La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) ha confirmado la ausencia de armas químicas en el centro de investigación de Barza en Damasco, donde según Estados Unidos el Gobierno sirio estaba desarrollando sustancias venenosas, ha revelado en rueda de prensa el jefe de la Dirección General de Operaciones del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, el coronel general Serguéi Rudskoi.

Según el coronel general, en el centro de Barza, que se encuentra en las afueras de Damasco, se llevaron a cabo hasta 2013 investigaciones sobre el desarrollo de medios de protección contra armas químicas donde se utilizaron diferentes sustancias tóxicas en cantidades permitidas por la Convención sobre la Prohibición de las Armas Químicas.
"En 2017, la OPAQ realizó inspecciones en los laboratorios de dicho centro de investigación que confirmaron la ausencia de cualquier actividad relacionada con el desarrollo y la producción de agentes químicos", aseguró Rudskoi.
Además, el coronel general subrayó que no había armas químicas en ninguno de los tres objetivos atacados en territorio sirio el 14 de abril por EE.UU., Reino Unido y Francia.
"Inmediatamente después de los ataques, acudieron a estas instalaciones destruidas muchas personas que trabajaban allí y curiosos sin ningún tipo de protección. Ninguno de ellos sufrió a causa de sustancias venenosas", dijo Rudskoi.
El militar señaló que con el fin de determinar el nivel de posible contaminación de la zona y de amenaza a la población civil como consecuencia del ataques con misiles de los aliados occidentales, los especialistas rusos de protección química, biológica y de radiación tomaron todas las muestras necesarias en las instalaciones de Barza.
"Su análisis reveló que no había sustancias químicas tóxicas y venenosas en el objeto destruido, lo que quedó confirmado en una correspondiente acta. Esto demuestra que en dicho centro de investigación hace mucho tiempo que no se llevan a cabo trabajos con sustancias tóxicas", subrayó Rudskoi.
"Habrían muerto decenas de miles de personas"

En lo que se refiere a otros dos blancos atacados por Occidente (un almacenamiento subterráneo y otro terrestre, localizados en la provincia de Homs), el militar ruso señaló que "nunca se han desarrollado o almacenado" armas químicas en la primera instalación y "tampoco jamás se almacenaron" en la segunda.
"En cualquier país, las instalaciones donde se realizan investigaciones sobre el desarrollo de armas químicas y se almacenan municiones de este tipo están cuidadosamente protegidas debido al gran peligro que representan para las personas. Sin embargo, no se observó nada parecido en los tres objetos arriba mencionados. Se trata de unos edificios y hangares ordinarios", hizo hincapié el coronel general.
El coronel general declaró que "no está clara la lógica de liderazgo militar y político de EE.UU., el Reino Unido y Francia al elegir estas instalaciones para su ataque".
"Si, en su opinión, estas instalaciones efectivamente tenían reservas de agentes químicos, entonces el impacto de los misiles de crucero podrían haber provocado grandes focos de infección en la zona. Y en el caso de Damasco, inevitablemente habrían muerto decenas de miles de personas", explicó el militar.
  • En la madrugada del 14 de abril, EE.UU., el Reino Unido y Francia realizaron un ataque múltiple con misiles de crucero contra el territorio de Siria. El pretexto del bombardeo era el supuesto ataque químico que habría sido perpetrado el 7 de abril en la ciudad siria de Duma (Guta Oriental), del cual Occidente acusa al gobierno de Bashar al Assad sin tener ninguna prueba concluyente.
  • El ataque de los tres aliados occidentales contra Damasco no fue aprobado por el Consejo de Seguridad de la ONU.
  • Rusia, por su parte, insiste en que el incidente de Duma fue un "montaje" para justificar los ataques de Occidente contra un Estado soberano, como pasó anteriormente en Irak y Libia.
  • El embajador ruso en Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, destacó ante el Consejo de Seguridad de ese organismo internacional que en los hospitales de Duma no hay pacientes con síntomas de intoxicación ni hay pruebas de suelo que delaten el uso de sarín o cloro.
  • Además, los servicios rusos de seguridad química y radiológica viajaron al lugar del supuesto incidente, pero "no se encontraron personas tratadas por intoxicación química", informó la embajada de Moscú en Londres a través de un comunicado.
  • La parte rusa tacha de "hipocresía" justificar el ataque contra Siria, cuando la situación en el país árabe ha empezado a normalizarse. El derecho internacional solo permite usar la fuerza en defensa propia o en virtud de un mandato del Consejo de Seguridad, insiste la parte rusa.