La cumbre de Sochi resultó en un compromiso para que las instituciones estatales sirias reanuden sus actividades en la provincia de Idleb, en el noroeste del país, en tres etapas.
En el marco del acuerdo alcanzado entre los presidentes ruso y turco, Vladimir Putin y Recep Tayyip Erdogan, se establece que Turquía pondrá fin a su apoyo directo a los terroristas de Idleb y que se declara una zona desmilitarizada en esta provincia, informa el periódico sirio Al Watan. Esto marca el primer paso para devolver Idleb al control del gobierno sirio legítimo y neutralizar el nuevo plan de guerra que EEUU y sus aliados han estado tratando de implementar, agrega el diario.
Las tres etapas acordadas en Sochi son las siguientes:
1 - Creación antes de mediados de octubre de una zona desmilitarizada de 15 kms a 20 kms de largo en la zona de Idleb a lo largo de las líneas de contacto entre los opositores armados y las fuerzas gubernamentales en la provincia de Idlib.El periódico libanés Al Akhbar también está investigando este acuerdo. Citando al Ministerio de Defensa ruso, Al Akhbar dijo que después de largas negociaciones entre los tres países responsables del proceso de Astana (Irán, Rusia, Turquía), se acordó que no habría un gran operación militar en Idleb a cambio de los compromisos citados. Sin embargo, lograr que se cumplan los términos del acuerdo alcanzado en Sochi no será fácil, dado que Turquía tiene ante sí objetivos difíciles que hasta ahora no ha podido conseguir.
2 - Todas las armas pesadas -tanques, cañones, lanzacohetes y otras- serán recogidas en el marco de un proceso que será supervisado por las partes rusa y turca hasta el 10 de noviembre.
3 - Una vez que los terroristas hayan entregado todas las armas pesadas y se hallan alejado de las zonas no militares, será el turno de las instituciones del Estado sirio de reemprender sus actividades en la provincia de Idleb antes de que finalice el año en curso.
El primer desafío de Turquía será garantizar que los terroristas abandonen la zona desmilitarizada, que es el bastión de los principales grupos terroristas, incluido el Frente al Nusra, el Partido Islámico del Turquestán y otros, y entreguen sus armas pesadas, algo que les dejaría indefensos ante el Ejército sirio.
Comentario: De hecho, como era de esperar, Al Qaeda y otros grupos terroristas ya han rechazado el acuerdo turco-ruso para establecer una zona desmilitarizada en Idlib: El portal de noticias FARS añade que: "las fuentes han indicado que si los grupos terroristas no aceptan el acuerdo, serán considerados enemigos del ejército turco y se combatirá contra ellos".
Al parecer, el acuerdo entre Rusia y Turquía requiere que los grupos armados en Idlib se adhieran al mismo de alguna manera. Por supuesto, sería sorprendente que lo aceptaran. Pero el hecho es que al haber accedido a que Turquía utilizara la "diplomacia" para negociar con sus grupos subsidiarios, Putin ha puesto a Erdogan en una posición en la que se verá forzado a posicionarse al lado de Rusia, Siria e Irán contra los combatientes que se están rehusando a seguir la línea de Turquía. Parecería que el abordaje de Putin de ser "sabio como una serpiente y gentil como una paloma", nuevamente está siendo efectivo para resolver un gran problema, en este caso, el problema de Turquía en Idlib.