El Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) denuncia que la decisión de Paraguay de declararlo "organización terrorista" favorece a Israel.

bandera palestina
Un menor palestino ondea la bandera palestina cerca del valle fronterizo, Franja de Gaza.
El Gobierno del presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, declaró el lunes "organizaciones terroristas" a nivel internacional a HAMAS y al Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), so pretexto de frenar el financiamiento de dichos movimientos en la región, de acuerdo con el ministro paraguayo del Interior, Juan Ernesto Villamayor.

HAMAS condenó el jueves la medida promovida desde Estados Unidos hace algún tiempo y que fue recibida con beneplácito por el régimen de Tel Aviv, diciendo que la decisión favorece al "terrorismo de estado" israelí.

"La decisión fortalece el terrorismo de estado que ha practicado Israel contra los palestinos durante décadas y proporciona una cobertura para que la ocupación siga con sus crímenes", se lee en un comunicado de HAMAS, recogido por la agencia turca de noticias Anadolu.

Tal medida, asimismo, "atenta contra el derecho internacional que garantiza el derecho a resistir ante la agresión y la ocupación con todos los medios posibles, incluido el conflicto armado"; una práctica que también corrobora la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en la resolución

En la nota, asimismo, se enfatiza que HAMAS es un movimiento palestino de resistencia que lucha únicamente por "la libertad" y "la independencia" de la nación palestina y contra la ocupación israelí, y que "no hostiga" a ninguna otra nación.

Teniendo en cuenta todo eso, prosiguió el comunicado, la decisión de Asunción no contribuirá a "la estabilidad" y "la seguridad" de la región, más bien "daña la buena relación entre los palestinos y paraguayos", advirtió.

HAMAS, con sede en la Franja de Gaza, pidió al Gobierno de Benítez que "revoque inmediatamente" la decisión y que adopte "cualquier medida necesaria para apoyar la lucha palestina por la libertad e independencia" ante Israel, así como "procese los crímenes de guerra de Israel" cometidos en las ocupadas tierras palestinas.

El nuevo embajador recurrente israelí en el país sudamericano, Yoed Magen, presentó el miércoles sus cartas credenciales al presidente paraguayo, como señal del reinicio de las actividades diplomáticas israelíes en Paraguay casi un año después de cerrar su embajada en Asunción (capital), por la decisión del Gobierno de volver a trasladar su embajada de Jerusalén (Al-Quds) a Tel Aviv.

Benítez cuestionó en septiembre, la decisión adoptada en mayo de 2018, por su antecesor Horacio Cartes de trasladar la embajada y consideró pertinente restablecer la sede de su embajada ante Israel en la ubicación previa, es decir, Tel Aviv, en el oeste de los territorios ocupados palestinos.

Tras Guatemala, Paraguay fue el segundo país que siguió pasos de EE.UU. y trasladó su misión diplomática a Al-Quds. El hecho generó una ola de rechazos y protestas, en particular en el asediado enclave costero palestino, donde las marchas por este motivo han dejado decenas de palestinos muertos en medio de una fuerte represión israelí.