Entonan "La Estaca" de Lluís Llach contra la represión de Lukashenko.
Coreografía de revoluciones de colores globalistas: los manifestantes bielorrusos adoptan una canción protesta catalana como himno
© AGENCJA GAZETA/Reuters
Durante semanas, la oposición bielorrusa ha estado tocando dos canciones en los desfiles y en las calles, que se han convertido en el himno de todos los detractores del régimen del "último dictador europeo".

Se trata de "Peremen" ("Cambio"), el rockero soviético Viktor Tsoï, pero sobre todo de la versión bielorrusa de una balada catalana antifranquista, "L'Estaca" ("La Estaca"), que también fue retomada a lo largo del tiempo por el movimiento polaco Solidaridad y los jóvenes de la revolución tunecina en 2011.

El texto, compuesto por el cantautor catalán Lluís Llach en 1968, hablad de la necesidad de unirse y luchar por la libertad. Evoca la metáfora de dos esclavos encadenados a un poste plantado en el suelo. El estribillo dice: "Si tiras fuerte por llí y yo por aquí, seguramente caerá... y seremos libres".

Llach escribió la canción en catalán en un momento en que la lengua catalana y otras manifestaciones de la identidad local estaban prohibidas en la España franquista.

Como muchos otros músicos, intelectuales y políticos, Llach se vio obligado a dejar su patria y a vivir en el exilio en París hasta la muerte del dictador en 1975.