La llegada del otoño y las bajas temperaturas han acabado con la ilusoria sensación de haber vencido al virus. En algunos países de Europa, el incremento de los casos positivos se sitúa en cifras récord desde el inicio de la pandemia hace ya casi dos años, con la novedad de que ahora se puede diferenciar entre "vacunados" y "no vacunados". Ante esta situación, vuelve a estar sobre la mesa la imposición de restricciones e incluso se barajan posibles confinamientos.
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En Alemania, la nueva ola se ha calificado como "la pandemia de los no vacunados", con cifras como la del pasado jueves, 50.000 nuevos contagios en un solo día, que han sembrado el pánico entre las autoridades del país. La canciller en funciones Angela Merkel se reunirá esta semana con su ministro de Sanidad, Jens Spahn, y los Estados federados para pactar medidas, entre las que se baraja la posibilidad de imponer la vacunación obligatoria para poder trabajar en determinados sectores, como el sanitario. Por el momento, en varios estados ya solo se puede acceder al interior de bares y restaurantes con la pauta completa de la vacuna o habiendo superado el virus.

Tras registrar la cifra más alta de contagios desde el inicio de la pandemia, 16.364 casos, y con la incidencia a 93,2 contagios por cada 100.000 habitantes, Países Bajos ha recuperado la distancia de seguridad entre personas, el límite de visitas, así como el teletrabajo, y, además, ha ordenado adelantar el cierre de tiendas no esenciales a las 18.00 horas y la hostelería, los supermercados y las farmacias a las 20.00 horas.

Por su parte, Austria sufre la expansión más rápida del virus desde marzo de 2020, batiendo récords de contagios. Aunque las cifras de hospitalizados todavía no han llegado a las registradas el invierno pasado, preocupa el incremento de la presión en las UCI. Al igual que en Alemania, el acceso a determinados locales estará restringido exclusivamente a aquellas personas que tengan la pauta completa de vacunación o hayan superado la Covid-19. Al mismo tiempo, el gobierno austriaco se plantea seriamente autorizar el confinamiento de las personas no vacunadas o curadas de la Covid-19, quienes solo podrían salir de casa para trabajar, comprar o dar un paseo. La polémica medida debe ser negociada con los gobiernos de las nueve regiones austriacas, así como en un debate en el Parlamento.

En Hungría vuelve a ser obligatorio el uso de mascarilla en el transporte público desde el 1 de noviembre y se permite que las empresas puedan exigir que sus trabajadores estén vacunados, quienes podrían perder su trabajo si en el plazo de un año siguen sin vacunarse.

Nada comparable con las medidas adoptadas por Eslovaquia, donde hoteles, bares y restaurantes vuelven a estar cerrados, al igual que los gimnasios. La mascarilla es obligatoria tanto en interiores como en exteriores y no se permite más de 100 personas vacunadas en un mismo lugar. El gobierno también se plantea limitar la libertad de movimiento de los no vacunados.

El país más afectado por la nueva ola de la pandemia es Bulgaria, con una media de 200 muertes diarias en una población de casi siete millones de habitantes. El país lleva sin gobierno desde hace meses y se encuentra en plenas elecciones, las terceras en un año.

Si algo parecen tener en común estos países es un lento o bajo porcentaje de vacunación. En Alemania, solo el 66,9% de ciudadanos cuenta con la pauta completa de vacunación y más de 3 millones de personas de más de 60 años todavía no se han vacunado. En Austria, el porcentaje desciende al 64%, algo que el canciller, el conservador Alexander Schallenberg, ha calificado de "vergonzoso". Mientras, Bulgaria registra la peor tasa de vacunación de la Unión Europea, con menos de un cuarto de la población con la pauta completa.

Por otro lado, Dinamarca, el primer país de la Unión Europea en volver a la normalidad, ha recuperado el pasaporte Covid para bares, restaurantes, discotecas y toda clase de eventos multitudinarios. Asimismo, los empresarios están autorizados a pedir a sus empleados una prueba de vacunación, curación o test negativo.