Traducido por el equipo de SOTT.netA menudo ocurre que acontecimientos que consideramos aislados se conectan como partes integrantes de un cuadro mucho más amplio, a menudo como parte de un plan de gran alcance, y con frecuencia con importantes implicaciones sociales, económicas o políticas que sólo se hacen evidentes cuando se ven en conjunto.
Los diversos temas de este ensayo añaden un contexto necesario a todos los grandes acontecimientos sociales, comerciales y geopolíticos de las últimas décadas, que puede ayudarnos a conectar los puntos. Para ello, es sumamente importante darse cuenta y comprender que en estos asuntos no hay accidentes, que las "crisis" (que no sean cosas como erupciones volcánicas) no ocurren porque sí, y que el resultado final de cualquier crisis, sea cual sea su apariencia, fue el resultado previsto.
Por ejemplo, hace ya muchas décadas, nos dimos cuenta de que en nuestra ciudad de Canadá una marca de tiendas estadounidenses parecía tener la costumbre de abrir nuevas tiendas a tiro de piedra de las tiendas de variedades "familiares" existentes (como se las llamaba entonces);
estas nuevas tiendas, brillantes y atractivas, provocaban inevitablemente el cierre de nuestras tiendas comunitarias tradicionales, con la consiguiente pérdida de los medios de vida de las familias propietarias. Fue una sorpresa saber más tarde que esta práctica existía en todas las ciudades de Canadá y con el tiempo se hizo evidente que cada uno de estos acontecimientos aparentemente menores reflejaba la
ejecución gradual de un plan asombrosamente depredador no sólo para establecerse en otro país, sino para eliminar progresivamente toda la competencia existente al hacerlo. Esta toma de conciencia llegó demasiado tarde para que las autoridades tomaran medidas preventivas,
lo que provocó la destrucción de lo que había sido una parte importante del paisaje cultural comunitario de Canadá.
© Blue Moon of ShanghaiMark Reilly.
En una categoría diferente, y más recientemente, nos enteramos de que durante un período de diez o más años que terminó alrededor de 2015,
GlaxoSmithKline participó en un enorme fraude fiscal y de mercadotecnia en China (
1) (
2),
que implicó miles de millones de RMB en sobornos masivos y sistémicos y falsificación de cuentas, el descubrimiento se vio salpicado por la huida del país en el primer avión con destino a Inglaterra del Director General de la empresa en China, Mark Reilly, "en un viaje de negocios previamente planeado", y con la intención de permanecer allí "para ayudar con la investigación desde ese extremo". (
3) A falta de información adicional, tendemos a considerar esta revelación como un asunto interno en el que está implicado el típico grupo de "unas cuantas manzanas podridas".
© Blue Moon of Shanghai
, habiendo sido multada con miles de millones de dólares sólo en EE.UU. por repetidos sucesos. Este conocimiento adicional modifica sustancialmente nuestra percepción de la situación. Cuando, con un poco de investigación adicional, descubrimos que
todas las grandes empresas farmacéuticas han participado repetidamente en una amplia gama de actividades delictivas que han dado lugar a multas por un total de decenas de miles de millones de dólares sólo en EE.UU., nuestra apreciación de las actividades de GSK en China, y de todo el panorama de las grandes farmacéuticas, se ve muy alterada y es más precisa. Ahora sabemos algo que antes no sabíamos, y ahora comprendemos que no estamos tratando con unas cuantas manzanas podridas en un hecho aislado aunque desafortunado,
sino con una industria corrupta hasta la médula en todo el mundo (
4) (
5).
Comentario: Tiene un aire a Ted Kaczynski/Unibomber, en el sentido de que señala problemas políticos reales, pero con un desquiciado sentido mesiánico de la misión. Un chivo expiatorio perfecto.
La pregunta candente es, ¿quién puso a este loco en su lugar?
Para los conspiranoicos: