Traducido por el equipo de sott.netNo es casualidad que la escalada de la crisis en Ucrania se produzca en un momento en el que, justo cuando el mundo comienza a abandonar los combustibles fósiles contaminantes, el aumento de los precios de la energía está obligando a millones de personas a elegir entre poner comida en la mesa o calentar sus hogares. Tampoco es casualidad que la escalada hacia la guerra coincida con que las vacunas experimentales del COVID-19, basadas en el ARNm y el ADN, dirijan sus beneficios a los abultados bolsillos de la industria farmacéutica.
© UnknownPresidente estadounidense Biden - Presidente ucraniano Zelensky - Presidente francés Macron
Polonia Andrzej Duda - Canciller alemán Olaf Scholz - Líder polaco Andrzej Duda
Ya está claro que una
transición mundial para abandonar los combustibles fósiles diezmará los actuales modelos de negocio de los productores de petróleo y gas. Pero lo que no se entiende tan bien es que
los beneficios de la industria farmacéutica están ahora igualmente amenazados. Antes de la pandemia de COVID-19, los modelos de negocio de las empresas farmacéuticas
estaban al borde del declive terminal. En 2018, los investigadores que examinaban la industria predecían que la disminución de las tasas de éxito en el desarrollo de nuevos medicamentos, el aumento de los costes de los ensayos clínicos y la creciente competencia de los fabricantes de genéricos más baratos
podrían combinarse pronto para que la producción farmacéutica dejara de ser un negocio rentable.Si a esto le sumamos la creciente concienciación sobre los
riesgos potenciales y los peligros demostrados de las actuales vacunas experimentales COVID-19, y el hecho de que ya existen enfoques eficaces, seguros y no patentables para controlar las
enfermedades infecciosas,
las enfermedades cardiovasculares y el
cáncer con vitaminas y otras sustancias naturales, queda claro que se avecina
una transición viable para abandonar la medicina basada en los fármacos. Sin embargo, al igual que sus homólogos en las industrias del petróleo y el gas,
los modelos de negocio de las empresas farmacéuticas se verían diezmados por esta evolución.Esta posibilidad hace que la crisis de Ucrania sea aún más peligrosa, ya que la historia nos muestra que
las empresas petroleras y farmacéuticas han tenido en el pasado estrechos vínculos con la perpetración de guerras mundiales.
Comentario: Pekín afirma que el departamento de defensa estadounidense controla 336 laboratorios en todo el mundo: