Investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) han creado nuevas células solares orgánicas con un alto poder de conversión. También presentan las ventajas de ser muy delgadas, flexibles y transparentes, lo que las hace ideales para una gran cantidad de aplicaciones en el campo de la energía solar, especialmente integradas en edificios.
© ICFOManipulación de una placa con células orgánicas solares.
Imagine edificios en los que las ventanas, además de permitir pasar la luz del sol, captan a la vez la energía solar que se necesita para satisfacer todas sus necesidades energéticas. Los cristales se convierten en células solares de alta productividad que ayudan a reducir la dependencia de los combustibles fósiles y avanzar hacia un medio ambiente más 'verde' y más limpio.
Este escenario todavía no es posible, pero un reciente estudio llevado a cabo en el ICFO y publicado en la revista
Nature Photonics avanza en ese camino. Los científicos de este instituto han fabricado una célula solar orgánica óptima con un alto nivel de transparencia y una alta eficiencia de conversión de energía.
Según los autores, "
esto supone un paso prometedor hacia las energías renovables asequibles, limpias, ampliamente utilizadas y urbanamente integradas".
Hasta ahora, los paneles solares comerciales están, en su mayor parte, compuestos de unas células solares basadas en silicio cristalino, muy eficientes en la conversión de la radiación solar en energía eléctrica (aproximadamente 15% de eficiencia de conversión), pero con diversos obstáculos importantes para su máxima explotación.
Por ello deben ser correctamente orientadas para recibir la luz solar directa y aun así están limitados en su capacidad para absorber la luz difusa. Por otra parte, son pesadas, opacas, y ocupan mucho espacio.
Comentario: Además, los virus y bacterias pueden ser acarreados por cometas y con el incremento alarmante de meteoritos y/o cometas en la atmósfera, ¡sí que es algo a lo que hay que prestar mucha atención!