Ciencia y Tecnología
Un equipo de investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL), en Suiza, ha conseguido que ratas con lesiones en la médula espinal y parálisis severa vuelvan a caminar y a correr. Este sorprendente logro fue alcanzado mediante estimulación electroquímica, así como de la voluntad de movimiento de los animales. El sistema, que hizo posible el incremento de las fibras nerviosas del cerebro y de la médula espinal, comenzará a ser probado en humanos en uno o dos años.
Según la publicación en el portal Youtube, el primero se basa en una pintura fluorescente que rocía el vehículo en caso de accidente nocturno. De ese modo se evitan posteriores colisiones. El segundo invento es un dispositivo ubicado en la trasera del asiento del piloto. Tiene todo lo necesario para inmovilizar al accidentado, con lo que facilita y agiliza las tareas de los equipos de emergencia.
Shouryya Ray, es alumno de una escuela secundaria de Dresden, en Alemania.
Ha logrado resolver dos teorías de dinámicas de partículas que hasta ahora los físicos sólo podían resolver de manera aproximada con potentes ordenadores. Gracias a las ecuaciones ideadas por el muchacho, en lo sucesivo, se podrá calcular con exactitud la trayectoria de un proyectil y predecir cómo golpeará y rebotará en una pared, haciendo cálculos sobre la manera como le afectan la gravedad y la resistencia del aire.
La versión digital de The Daily Mail cuenta que Shouryya Ray emigró a Dresden desde Calcuta hace cuatro años sin dominar el idioma de alemán. Sus profesores se dieron cuenta en poco tiempo de que poseía una inteligencia extraordinaria y le permitieron saltarse dos cursos para que se encontrara en el nivel adecuado para sus capacidades.
El equipo de investigadores internacionales del Instituto Max Planck, utilizó fragmentos de ADN recuperados de huesos de 38.000 años de antigüedad que fueron hallados en Croacia. Los científicos utilizaron una máquina secuenciadora para obtener partes del código de ADN, que luego juntaron en la computadora.

Los científicos creen que los arcoiris atrapados pueden tener múltiples utilidades en distintos ámbitos.
Si esa historia fuera real, hace tiempo que a la pobre criatura le habrían robado su tesoro, ya que la tecnología no sólo es ya capaz de "atrapar" el arcoiris, sino que ya está usándose en modelos experimentales de sensores.
Un grupo de investigadores atrapó nuevamente el arcoiris desplegando unas 25.000 capas de invisibilidad tan finas como un cabello humano, y elaboraron un prototipo de sensor con posibles usos no sólo en sistemas de invisibilidad sino como sensor en biomedicina.
Las dos investigaciones, dirigidas desde la Universidad de Leeds en el Reino Unido, se centraron en localizar y observar cámaras de magma en las cordilleras submarinas volcánicas de la Tierra, que constituyen cadenas extensas de volcanes a lo largo de las cuales la Tierra crea nueva corteza.
Los científicos trabajaron en Afar (Etiopía) e Islandia, los únicos lugares del mundo en que estas cordilleras asoman sobre el nivel del mar. Las cordilleras volcánicas (las fronteras entre placas que se separan en el suelo oceánico) aparecen cuando se forma una fisura que acarrea la separación entre placas tectónicas. El magma (roca fundida) se abre paso a través de los puntos débiles en la frágil corteza superior, saliendo al exterior como lava y formando nueva corteza al enfriarse.
Las cámaras de magma funcionan como sistemas de tuberías, canalizando el magma a presión a través de redes de "cañerías" subterráneas.
Los estudios revelan nuevos datos sobre dónde se almacena el magma y cómo se mueve a través de la red de tuberías geológicas. Encontrar dónde se encuentran las cámaras de magma y cómo se comportan puede ayudar a identificar señales de alerta temprana asociadas a erupciones inminentes.
Se trata de una rarísima alineación en el que un astro se interpone en la línea que forman el Sol y la Tierra. "Lo que veremos será muy similar a lo que podemos contemplar cuando los exoplanetas pasan por delante de su estrella", explica el astrónomo Jay M. Psachoff, quien trabaja en la Escuela Universitaria Williams (EE. UU.).
La última vez que se pudo observar el fenómeno celeste desde la Tierra fue en 2004. "Pero ahora va a ser particularmente especial, ya que el Sol está atravesando una fase de muchísima actividad", destaca Psachoff.

En este período, si miramos un mapa estelar, el Sol transita en la Constelación de Tauro y se rodea de los planetas Júpiter, Mercurio y Venus.
En los próximos días, entre el 20 de mayo y el 6 de junio 2012, sorprenderán en los cielos de la Constelación de Tauro y de su opuesta Constelación de Escorpio, tres eclipses o grandes conjunciones, muy esperadas por los astrónomos y aficionados: el eclipse solar anular, el eclipse lunar parcial y el tránsito solar de Venus, éste último en el comentado grado 20 de Tauro, considerando 30 grados por constelación.
El 6 de junio, en el día 20 de Tauro, en su parte inferior, el Sol será transitado por Venus. La NASA anunció que usará la Luna como espejo, (ver trayectoria), para estudiar estas imágenes sin interferencia de los rayos directos.
La Luna por su parte tiene una órbita muy veloz, así que después de sostener el eclipse solar anular el 20 de mayo (ver trayectoria), en la Constelación de Tauro en el hemisferio norte, el 4 de junio se encuentra en el lado opuesto, en el hemisferio sur con un eclipse parcial lunar en la Constelación de Escorpión.